El pasado 14 de marzo, CODINSE entidad de referencia en el Nordeste de Segovia, el territorio más despoblado de la provincia con 5,6 hab/km2, organizó una jornada dirigida a toda la población para animar a la manifestación del próximo 31 de marzo en Madrid bajo el lema “Revuelta de la España Vaciada” y poner de manifiesto la problemática de la despoblación.

Esta jornada quiso despertar el optimismo  y cambio de mentalidad, haciendo ver la importancia de las alianzas en la lucha contra la despoblación.

Tanto el presidente como la gerente de CODINSE recalcaron que el reto demográfico está presente, institucionalmente parece que empiezan a darse cuenta del problema. Volvió a reiterarse la idea que se puso de manifiesto en la reunión celebrada con representantes municipales el pasado 28 de febrero, la necesidad de que los políticos locales deben pedir a sus representantes que incorporen el problema en sus agendas políticas con partidas económicas.

El presidente de la asociación de jóvenes Ruralea apuntaba que una de las claves son los jóvenes y el hacer políticas pensando en que se queden no solo en los pueblos, también  en  España “este país pierde jóvenes, porque no hay oportunidades y la vida para ellos busca hacerse paso”.

Las exposiciones fueron cerradas por José Antonio Herce, catedrático universitario que coordinó el estudio “Una fiscalidad diferenciada para el progreso de los territorios despoblados en España” encargado por la SSPA (Red de áreas escasamente pobladas del sur de Europa). Destacó el concepto de ultraperiferia demográfica (haciendo referencia a la escasez y dispersión de la población) en el que se basa la justificación de las ventajas fiscales que se proponen para frenar la despoblación, consistentes en la reducción del 50% de la cuota íntegra del IRPF y otras figuras impositivas. Este concepto es tomado de otro similar que se tiene como excepcionalidad en el Tratado de Funcionamiento de la UE que afecta a Canarias, ultraperiferia geográfica. El estudio ha demostrado que las medidas fiscales propuestas no se contraponen al sistema jurídico y en esta exención siempre existiría un retorno fiscal y ha sido ya presentado para su análisis por el gobierno central y el Parlamento Europeo.

El acto concluyó recordando el objetivo para el que fue convocado, convertir la asistencia a la manifestación  del próximo 31 de marzo en Madrid «una  necesidad para nuestro territorio; ya que no estamos dispuestos a soportar más la perdida de servicios, la insostenibilidad de las explotaciones agrarias y ganaderas por los precios de sus productos, la carencia de infraestructuras esenciales para poder vivir con dignidad (ferrocarril, mejora en las TICs – empezando por la banda ancha para todo el territorio-estado de conservación de todas nuestras carreteras), la ignorancia de nuestro territorio por parte de las administraciones, que los funcionarios no reciban compensaciones por trabajar y residir en la comarca, la desindustrialización del territorio…»