Este clásico de Plauto, que convirtiera en un gran éxito de público el dramaturgo francés 18 siglos después, se estrenó en el Teatro Romano emeritense el 29 de julio con una versión actualizada, concebida, además de como la comedia de enredos entre dioses y humanos que es, como una historia de amor en la que los roles femeninos adquieren una mayor significancia que en el original, según explica su director y autor de la versión, Juan Carlos Rubio. «He introducido una serie de cambios en la historia para que ellas, al igual que ellos, sean motor y no solo acompañamiento», afirma el director.
Ambientada en una caravana de circo de los años 50, la historia conocida de duplicidades de identidades que provocan múltiples situaciones llenas de comicidad plantea una reflexión sobre la imagen, sobre la identidad y ésta a partir de la mirada del otro, temas de máxima actualidad dado el protagonismo hoy de las redes sociales.
Un gran elenco de actores da vida a esta comedia: Pepón Nieto da vida el personaje de Sosia; Toni Acosta asume los roles de Mina, Noche y Alcmena; Fele Martínez es Anfitrión; el gaditano José Troncoso interpreta a Mercurio; Dani Muriel da vida a Júpiter, y María Ordóñez encarna a Cleo, Aurora y Cleantis.
La puesta en escena «divertida, repleta de emoción, ironía, poética y mucho humor», en palabras de su director, le ha puesto un envoltorio de lujo la unión de otros tres talentos: el del coreógrafo Chevi Muraday, encargado del movimiento corporal de los actores; el del escenógrafo Curt Allen Wilmer (Aquiles el hombre, en 2016, y premio Max en 2017 por su escenografía de Hamlet para la compañía Teatro Clásico de Sevilla) y la música original de Julio Awad, autor y arreglista de grandes y exitosos musicales como Sonrisas y lágrimas o Priscilla Reina del Desierto, entre otros muchos.