El tráfico de mercancías por las carreteras de Castilla y León se disparó un 50,09 por ciento durante el segundo trimestre del año y alcanzó la mayor cifra en una década, puesto que el sector consiguió mover 44,6 millones de toneladas. Esto ha permitido a los transportistas elevar un 28,31 por ciento su actividad en la primera mitad del año, marcado todavía por las restricciones del COVID-19.

De hecho, el transporte acumula un primer semestre en este 2021 bastante mejor que el de 2019, el año previo a la pandemia, puesto que por las carreteras de Castilla y León han viajado 77,8 millones de toneladas, frente a las 72,57 que se contabilizaron entonces, es decir un 6,72 por ciento más. Por tanto, el rumbo que experimenta el sector en este ejercicio ya supera las cifras previas al coronavirus, de acuerdo a los datos recopilados por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.

El comportamiento en la Comunidad del sector fue más positivo que en el conjunto del país. En España, el tráfico de mercancías por las carreteras creció un 26,7 por ciento en el segundo trimestre, prácticamente la mitad que en Castilla y León, hasta un total de 429,11 millones de toneladas. También en el primer semestre el incremento respecto a 2020 es del 15,02 por ciento, mientras en los últimos cuatro trimestres -de julio de 2020 a junio de 2021- el avance se quedó en el 5,64 por ciento.

Asimismo, en el segundo trimestre el transporte de mercancías dentro de la Comunidad experimentó un aumento del 90,27 por ciento, en relación al mismo periodo del año anterior, con 25,08 millones de toneladas. De esta cantidad, la mayoría, 18,46 millones, correspondió a movimientos entre municipios y 6,62 a tráficos intramunicipales. En el primero, la subida fue del 73,38 mientras en el segundo hubo un despegue del 161,25 por ciento. Igualmente, en los últimos 12 meses, anotaron una rebaja del 27,88 por ciento y en el primer semestre del 48,14 por ciento.

Las operaciones con otras comunidades movieron entre abril y junio un 19,34 por ciento más de mercancías, con 18,77 millones de toneladas, de las que 7,8 se recibieron y 10,97, se expidieron. En los primeros seis meses, el avance fue del 12,95 por ciento y en los últimos cuatro trimestres del 10,84 por ciento.

Por otra parte, el mercado internacional dejó un retroceso del 3,17 por ciento en el segundo trimestre del año, con un volumen de 836.000 toneladas, de las que 456.000 se recibieron y 380.000 se expidieron. Por el contrario, en los últimos 12 meses, anotó un aumento del 5,11 por ciento y en el primer semestre del 10,53 por ciento.

Sostenibilidad y morosidad

Ante la demanda del sector, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana presentó en abril al Comité Nacional del Trasporte por Carretera (CNTC) el esquema general de un “plan de impulso de la sostenibilidad del transporte de mercancías por carretera”. Es una de las medidas contempladas en la Estrategia de Movilidad Segura, Sostenible y Conectada 2030.

El planteamiento es avanzar de manera equilibrada en la mejora de las condiciones de trabajo de los profesionales del sector, así como buscar la eficiencia y optimización de las operaciones de transporte. Dentro de las medidas, se contempla la continuidad de las ayudas, como las de formación o abandono de la actividad, y se contemplan otras nuevas englobadas dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, como las ayudas al impulso de la digitalización, a los aparcamientos seguros o para la renovación de vehículos industriales, completando de este modo las ayudas para renovación de vehículos recogidas en el plan Moves III.

Además, en febrero, el Gobierno aprobó una modificación en la ley de ordenación de los transportes terrestres para incorporar un régimen sancionador contra la morosidad. De esta manera, se incorpora un nuevo tipo infractor por el incumplimiento de un plazo máximo legal de pago para estas empresas, que se constituye en 60 días en los contratos de transporte de mercancías por carretera.