La obra de Mon Montoya puede disfrutarse en el Palacio de Quintanar hasta el próximo 23 de octubre. Esta exposición cuenta con obras realizadas entre 2015 y 2022, que reflejan la facilidad del artista para trabajar en tamaños muy diferentes.

Mon Montoya tiene como uno de sus objetivos indagar en la intrincada relación entre la imagen y la palabra. Para demostrar así, la capacidad expresiva de la pintura, haciéndola ver como un modo de conocimiento.

Tras nueve años sin exponer, Mon Montoya lleva al Palacio de Quintanar una exposición con obra plástica de todos los formatos, con el nombre de «Diario de un sumergido».

Cien obras

Esta exposición se encuentra en la planta de acceso al Palacio de Quintanar, donde se puede disfrutar de un centenar de obras del artista extremeño, radicado en Segovia desde hace años.

La exposición que permanecerá en el Palacio de Quintanar hasta el 23 de octubre hace un buen recorrido por los formatos trabajados por el artista, que se mueve indistintamente entre el gran formato, con lienzos gigantes de 3×4, o por pequeños y delicados papeles donde las acuarelas muestran la parte más intimista del autor.

Nombre

Por último, el artista ha explicado el porqué del nombre elegido para la exposición. «Sumergido significa estar trabajando en silencio, durante nueve años… Es una muestra del trabajo metódico, que uno va haciendo poco a poco», señalaba Mon Montoya.