Los siete casos positivos del brote de COVID-19, declarado este miércoles por la Junta en el municipio segoviano de Chañe, son trabajadores temporales de una cooperativa familiar hortofructícola, ‘Viveros Campiñas’, según confirmó a ICAL su responsable Gustavo Herranz, que además aseguró que al detectar al primer afectado, que “presentaba una pequeña sintomatología”, se dio aviso a su servicio de prevención de salud laboral que le hizo la PCR y a raíz del positivo se pusieron en contacto con las autoridades sanitarias.

Gustavo Herranz recordó que el coronavirus no entiende de fronteras ni de nacionalidades, que afecta a todo el mundo y en todas partes, como se está viendo en los numerosos brotes por todo el país. La cooperativa, que se encuentra en plena campaña de recolección con un alrededor de 600 trabajadores, cumple a rajatabla todos los protocolos establecidos para combatir el coronavirus, como el uso obligatorio de mascarillas, guardar las distancias de seguridad y “la readaptación de todos los puestos de trabajo”.

Herranz aseguró que hay unas estrictas medidas higiénicas en la empresa, como centro de trabajo, y que además piden a sus empleados que en su ámbito personal y social también mantengan esa misma responsabilidad. En su opinión, el contagio es más probable que se ha registrado fuera del ámbito laboral y subrayó que están cumpliendo todas directrices que les marcan las autoridades sanitarias de Segovia.

El brote de COVID-19 se inicia en estas personas que trabajan para su empresa. “Han dado positivo casi todos, la mayoría de los trabajadores que son convivientes entre sí, pero no todos”, subrayó el propietario de la industria hortofructícola, y también hay un caso positivo en otra persona que vive en otra vivienda. Los siete positivos por PCR, según la Junta de Castilla y León, tiene una sintomatología leve o asintomáticos, sin requerir hospitalización y tienen entre 20 y 60 años. Además están en estudio otras diez personas como contactos estrechos o directos con los afectados por coronavirus.

Gustavo Herranz no escondió que están “disgustados, entre comillas, con este tema” pero a la vez insistió en que es muy difícil detectar a las personas asintomáticas y en Segovia se han dado muchos casos durante la pandemia por lo que podía pasar. Herranz declaró que los contagiados se encuentran en sus viviendas. En las próximas hora y días se darán a conocer los resultados de las pruebas realizadas en esta cooperativa agrícola.

El responsable de la cooperativa no tuvo problemas para hacer declaraciones a los medios de comunicación y explicar la situación que se ha dado en su empresa con estos siete casos positivos por COVID-19. Desde el Ayuntamiento de la localidad todavía no se conocen reacciones oficiales ya que el alcalde no atendió los requerimientos realizados durante toda la jornada.

Zona básica de Salud de Cuéllar

El municipio de Chañe también pertenece a la Zona Básica de Salud de Cuéllar como  Chatún, donde en otra empresa agrícola, se hizo un seguimiento de siete trabajadores vinculados con el brote declarado por coronavirus, hace unas semanas, en el barrio de Las Delicias de Valladolid. El alcalde pedáneo de Chatún, Salvador Muñoz, explicó que les había tocado “de refilón” porque estas personas no hacían vida en el pueblo, “vienen a trabajar desde Valladolid y se marchan”.