La Diputación de Segovia anunció hoy el nuevo calendario fiscal para el pago de los tributos locales que será de aplicación excepcional en el ejercicio 2020, en el que se retrasan y amplían los plazos, para paliar los efectos del Covid-19. La Comisión Permanente de Seguimiento ya acordó, a mediados de marzo, aplazar ese cobro hasta junio, pero ante la prolongación del estado de alarma y de la reincorporación a la normalidad de algunos sectores productivos, se retrasa hasta el 1 de julio.

Según explicaron desde la Diputación de Segovia, mientras que el año pasado, el plazo que tenían los contribuyentes para pagar sus tributos era de dos meses, en este ejercicio, oscila entre los 77 días del impuesto de vehículos y tasas y el concepto IBI de naturaleza rústica hasta los 109 días en el caso del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) urbano. De esta manera, los ciudadanos no tendrán que comenzar a pagar el impuesto de vehículos y las tasas de basura, agua, alcantarillado y otras hasta el 1 de julio y podrán hacerlo hasta el 15 de septiembre.

En el caso del IBI urbano, el plazo se extiende desde el 20 de julio hasta el 5 de noviembre, mientras que el Impuesto sobre Actividades Económicas podrá pagarse del 14 de septiembre al 9 de diciembre y el impuesto de rústica y tasas del 24 de septiembre al 9 de diciembre.

Desde la institución provincial remarcaron que, a pesar de estos aplazamientos en el cobro, continuarán haciendo un esfuerzo en sus operaciones de Tesorería para anticipar más de 9,6 millones de euros de la recaudación de tributos a las entidades locales en junio, que supondrá el segundo anticipo del año, equivalente al 22,50 por ciento de la recaudación de sus tributos para el ejercicio 2020, tras el efectuado en la primera quincena de abril.