La Academia de Artillería de Segovia cumple este sábado el 256 aniversario de su fundación, en el Alcázar, con la elaboración de un vídeo en el que recuerda su trayectoria desde el 16 de mayo de 1764 como “núcleo de modernización científica, industrial y educativa” y herederos de una tradición siempre basada en el impulso innovador para que los artilleros españoles del siglo XXI continúen “su labor de convertir el futuro en presente”.

La historia del Real Colegio de Artillería comienza en tiempos de Carlos III, bajo dirección del Conde de Gazola, como parte “de los esfuerzos de dinamización de los Ejércitos y de toda la sociedad española”. Actualmente es el centro docente militar más antiguo del mundo, en sus instalaciones en el antiguo convento de San Francisco de Segovia, donde se tuvieron que trasladar tras el incendio ocurrido en el Alcázar, el 6 marzo de 1862.

Desde la Academia de Artillería recordaron que por sus aulas pasaron “grandes científicos, grandes matemáticos y grandes héroes para convertirlas en un núcleo de modernización científica, industrial y educativa”. Uno de sus profesores fue el francés Louis Proust que descubrió la ‘Ley de Proporciones Definidas”, base de la química industrial moderna y la industria tecnológica.

El centro remarcó que es este mismo espíritu fue el que hizo que desde su inicio se dotara para a los alumnos y profesores de una de las mejores bibliotecas científicas. “Su impulso innovador continúa hoy en día para situarse a la vanguardia del uso de las nuevas tecnologías, la formación online o a la adaptación a los últimos estándares europeos”, argumentaron. Los desarrollos tecnológicos hacen que la Academia de Artillería de Segovia sea pionera “a nivel mundial” con uno de los simuladores de Artillería de Campaña más avanzados del mundo.

El vídeo conmemorativo de su 256 aniversario destacó el lema de este centro militar, donde se impulsaron las escuelas de ingeniería y la formación profesional como hoy la conocemos. “Solo desde la tradición es posible avanzar con paso firme en la innovación, los artilleros españoles del siglo XXI continúan su labor de convertir el futuro en presente”, resumió.