Nuevo éxito de la jornada solidaria a favor de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) celebrada este domingo en la localidad segoviana de Aldea Real. Deportes, comida, mercadillo, actividades para niños… Un completo programa ha compaginado desde primera hora la diversión con una buena causa, en la que vecinos y visitantes se han volcado.

Cerca de 500 personas se han reunido para comer en la tercera edición de la macarronada popular organizada para recaudar fondos para la AECC, con la que todos en este pueblo de unos 350 habitantes están muy concienciados. Pasta, bebida y postre en los que la marea de camisetas azules han compartido un día a la sombra de los árboles del parque de San Blas, justo, además, en vísperas de las fiestas en honor de la Natividad de la Virgen que se celebrarán el próximo fin de semana y que desde este lunes empiezan a calentar motores con la semana cultura.

A las 9.00 de la mañana partía la marcha MBT organizada por los clubes Sexmeros y Las Kamelias, con la colaboración del Ayuntamiento de Aldea Real. Por delante, 40 kilómetros en bicicleta por caminos recorriendo pueblos del entorno pertenecientes al Sexmo de Cabezas. 28 corredores de todas las edades, entre ellas varias mujeres y hasta algún niño que ha completado con éxito el trazado, han disfrutado de la marcha, aunque con alguna caída y más de un pinchazo, propios de este tipo de pruebas.

Ya de vuelta, momento de reponer energías en la macarronada. Pero antes, y para ir abriendo boca, más de uno se ha deleitado con los dulces del mercadillo solidario, otra de las actividades de la jornada para recaudar fondos.

Rosquillas, pastas, magdalenas, bollos, mermeladas, jamón, bebidas… Un poco de todo elaborado con mucha entrega por los vecinos de Aldea Real y visitantes, que se han volcado de nuevo por esta buena causa. Sobre las mesas del variado mercadillo, numerosos productos de todo tipo hechos a mano o donados por personas y empresas. Bisutería, paños, juguetes, bolsos, cuadros… Todos han encontrado algo que llevarse y, de paso, colaborar con la AECC.

Tras la comida, un tiempo de reposo y de nuevo a moverse, gracias a una jornada de baile. Y para reponer de nuevo energías, chocolate para cerrar una nueva y exitosa jornada con la que Aldea Real ha demostrado su solidaridad.