El alcalde de Segovia señaló hoy que el Ayuntamiento de la capital deja de percibir cada año alrededor de 300.000 euros en concepto del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) por la exención de impuestos a los Bienes de Interés Cultural (BIC). Según un informe realizado por los técnicos del consistorio segoviano con datos del catastro, más de 250.000 euros, estarían directamente derivados de los inmuebles de la Iglesia entre los que se encuentran locales, pisos, o iglesias. Además, Arahuetes recordó que en la ciudad existen edificios civiles con la declaración de BIC, igualmente exentos de este impuesto, como el Torreón de Lozoya o la Casa de las Cadenas. En total, la cifra se eleva por encima de los cien edificios, a los que sí se cobran las tasas de agua, basuras o alcantarillado, a diferencia de otras ciudades.
Respecto a la decisión de ciudades como Zamora de empezar a realizar el cobro del impuesto, el regidor de Segovia, manifestó que en base a la ley “los ayuntamientos no tenemos capacidad legal para cobrar el IBI a estos edificios”. En este sentido, Arahuetes señaló que “salvo que me hayan mal informado”, esta exención está regulada por una ley de ámbito nacional. En el caso de que así se hiciera, añadió el primer edil, la Iglesia podría recurrir y ganar la sentencia con seguridad.
Esta es precisamente una de las reivindicaciones históricas del Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España, “que somos las verdaderamente perjudicadas”, aseveró Arahuetes, quién además señaló que se debería compensar a las ciudades que más perjuicios tienen por esta exención que suponen una importante “merma en los ingresos”.