Los montajes de la asociación cultural ‘Amigos del Belén del Cristo del Mercado’, en el interior de la bella ermita de este barrio segoviano, se han convertido en muy pocos años, en una de las principales atracciones navideñas, con miles de visitantes y largas colas. Con nacimientos que recrean las escenas evangélicas en paisajes urbanos con un toque cien por cien segoviano y siempre echando la vista hacia atrás. Este año, el barrio de San Marcos.

Desde la primavera, los miembros de este colectivo de belenistas llevan preparando el montaje de esta Navidad, que lleva abierto al público desde mediados de diciembre. La portavoz y una de las impulsoras de la asociación ‘Amigos del Belén del Cristo del Mercado’, Begoña de Pablos, señala que con la colaboración del historiador y vecino del barrio, Alberto Herreras, recrean la zona del pintoresco y hortelano barrio del San Marcos, rescatando de su almacén el fantástico e impresionante Alcázar que realizaron en su segundo año.

“Está la iglesia de San Marcos, el fielato, unas cuantas casitas que son tan simbólicas de San Marcos y hemos hecho hincapié en que, en toda esta zona de la Alameda del Parral, existieron hasta cinco barrios”, subraya. Uno de estos barrios, el de San Gil, estaba en la zona baja de los jardines del Alcázar.

Detrás de cada montaje hay una gran labor de documentación e investigación histórica sobre la ciudad para poner en valor “aspectos que desconocemos de Segovia”. Un relato de este pedazo del pasado que se detalla e imprime en un folleto que está a disposición de los visitantes para contextualizar el belén y enriquecer la experiencia.

Una base documental sobre la que empezar a elaborar las maquetas de los edificios y todos los espacios que lo conforman. Piezas que elaboran “desde abril y mayo” en uno de los locales de la Parroquia del Cristo del Mercado y que luego trasladan a la ermita, con otros diez días intensos de montaje. Los materiales empleados son un tipo de poliespán compacto que se trabaja muy bien y “mucho corcho, corteza de alcornoque, que es lo que hace que este año sea tan impresionante y llamativo”.

En cuanto a las dimensiones del belén del Cristo del Mercado, “llevamos tres años pidiendo al ayuntamiento la plataforma de 6×4, serán unos 24 metros. Este año, por el desarrollo del río Eresma, es un poco mayor, con dos mesas más para la instalación del desagüe del agua”, explica Begoña de Pablos.

La asociación cultural dedica una parte de su presupuesto a ir adquiriendo nuevas figuras, este año el esfuerzo ha sido doble ya que también han asumido el reto del montaje del Belén Tradicional del Torreón de Lozoya, de la Fundación Caja Segovia, para recuperar toda una tradición navideña de la ciudad de Segovia, en este emblemático edificio de la plaza de San Martín.

En el Nacimiento de la ermita, que recrea San Marcos, se pueden encontrar todas las escenas del relato evangélico del nacimiento de Jesús: la visita de María a su prima Isabel; la Anunciación del Ángel; la búsqueda de la posada; la Sagrada Familia; la anunciación a los pastores; la huida a Egipto, etc. Un montaje que es muy fácil de ver para disfrutar de todos sus detalles. En la edición del año pasado, calculan que pudieron pasar por la ermita entre 14.000 y 15.000 personas, teniendo en cuenta de muchas de ellas hicieron varias visitas.

La asociación ‘Amigos del Belén del Cristo del Mercado’ se ha consolidado en muy pocos años con sus montajes diferentes, en los que recrea con todo el cariño y de forma muy minuciosa cada temática que eligen sobre Segovia. “Lo tiene que vivir desde el primer momento y nosotros lo hemos enfocado bien. Hay momentos duros y tensos pero estamos consolidados”, resume. Una muestra del interés que despierta su trabajo son las largas colas para acceder al interior, en los días principales del periodo navideño.

Homenaje a un persona muy especial

Este 2019, el belén del Cristo del Mercado es todavía más especial al estar dedicado a la figura del sacerdote Domiciano Monjas, fallecido en febrero, que era muy querido y admirado. Begoña de Pablos, remarca que Domiciano Monjas fue uno de los fundadores de este colectivo, que siempre al concluir el belén en cada edición, en el interior de la ermita, siempre les decía que “era un milagro. Veis, existen los milagros”.

Domiciano Monjas fue párroco del Cristo del Mercado, profesor, poeta, escritor y “amigo”, con una gran calidad humana. Para rendirle homenaje, la asociación ha adquirido una figura, que se identifica perfectamente, para que esté presente, con uno de sus libros.

Ideas no faltan

En la Parroquia se hizo un concurso de belenes para el barrio y Begoña fue la ganadora. Tenía mucha ilusión por poder exponerlo en la ermita y así lo propuso. Su deseo se hizo realidad y así comenzó este colectivo, ya que la navidad siguiente ya pidió ayuda porque el espacio es muy grande. “Comenzamos unas ocho o diez personas”, recuerda, “ahora seremos unas 30 en la asociación y así trabajando unas veinte, haciendo diferentes cosas”.

El primer montaje se centró en el barrio del Cristo del Mercado, con su ermita y los elementos más reconocibles del mismo. “Recuerdo que pusimos unas cuevas para recrear la parte del valle de Tejadilla. Al año siguiente, el Alcázar, con una representación de la antigua Catedral de Segovia que estaba situada junto a la fortaleza y, en la parte baja, el río Eresma y el arroyo Clamores”.

Después, realizaron el belén situando todas las escenas en la estación de ferrocarril convencional, que forma parte del barrio, con la recreación de la propia estación, los trenes y vagones. En 2017, representaron la icónica plaza del Azoguejo, a lo pies del Acueducto, viajando al pasado, construyendo la desaparecida iglesia de Santa Columba y viviendas delante del monumento romano, para recordar cómo era la ciudad en el siglo XVI

El año pasado, una nueva sorpresa para los miles de visitantes con la escenificando la Natividad de Jesús ambientada en el popular barrio de San Lorenzo, cosechando comentarios muy positivos en la prensa segoviana sobre la calidad y detallismo de la maqueta para reflejar la actividad, edificios y encanto de este barrio de la capital, con su característica plaza empedrada.