Los títeres han encontrado su mejor refugio en la ciudad de Segovia. El espíritu de Titirimundi se extiende a otras propuestas como la Colección de Títeres del Maestro Francisco Peralta, que visitan al año casi 6.000 personas, en un espacio único en la plena muralla, la Puerta de Santiago. El gran marionetista gaditano encargó a la capital del Acueducto cuidar y difundir su trabajo y sus personajes llenos de hilos, engranajes, articulaciones y varillas.
El Museo Peralta de Segovia conquista a visitantes de dentro y fuera de nuestras fronteras. En 2016, recibió a cerca de 6.000 visitantes, un 25 por ciento más que el anterior, y este año sigue el mismo camino superando ya las 5.400 personas. La gerente de la Empresa Municipal de Turismo de Segovia, Patricia Otones, explica que durante las fiestas navideñas el museo tiene mucho movimiento porque son muchas las familias que acuden a la llamada del alma titiritera.
A la vuelta de las vacaciones escolares, para el primer trimestre de 2018, tienen ya cerrada la visita de colegios segovianos y de otras provincias de Castilla y León, y “como curiosidad un colegio francés y un instituto italiano, este último es ya es cliente fijo y suele venir todos los años durante su estancia en Madrid, se acercan a Segovia para visitar el museo”.
El Museo Peralta ocupa los dos pisos del cubo que forma la Puerta de Santiago y se ha concebido como “un espacio único y diferente en el que todo está pensado para dar todo el protagonismo a las marionetas” que ‘viven’ en vitrinas diseñadas a medida, “con un estudiado juego de luz y oscuridad que permite una perfecta visión y conservación”, según explica la gerente de la Empresa Municipal de Turismo de Segovia.
Madera y metal
Los títeres están fabricados con madera, vendas, escayola y cola de conejo, materiales reciclados, tela y elementos de metal y tuvieron una interesante vida teatral al formar parte de las representaciones de la obra del romancero popular ‘La condesita’, de piezas musicales de autores consagrados como ‘El retablo de Maese Pedro’ de Manuel de Falla sobre el episodio del Quijote, o de la narrativa infantil como ‘Los melindres de Belisa’ de López de Vega.
El maestro Francisco Peralta descubrió Segovia a finales de la década de los 70, cuando se creó la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de la Casa de los Picos. Peralta impartió cursos de construcción de títeres y fue profesor de Modelado y Vaciado. En los primeros cuatro años de los años 80, con sus alumnos, realizaron un taller experimental para dar vida a los personajes del ‘Clérigo Ignorante’ de Berceo y de ‘El Romance de la Lópesita’ con los que participaron en el I Festival Internacional de Zamora.
El maestro marionetista también creó a los títeres ‘Bastian y Bastiana’ de Mozart. Antes de recalar en Segovia, todos sus personajes recorrieron miles de kilómetros para subirse a escenarios de ciudades españolas, europeas y de norte de África.
Peralta y Titirimundi
Peralta y su esposa, Matilde del Amo, crearon una compañía junto a sus cinco hijas y formaron parte del arranque del Festival Internacional de Títeres de Segovia. Titirimundi y Peralta encajaron a la perfección, compartiendo y viviendo su amor hacia los títeres en las calles y plazas segovianas.
Un romance que culminó en 2014 con la apertura de su Colección de Títeres en la rehabilitada Puerta de Santiago. El entonces alcalde de la Pedro Arahuetes recordó que Peralta es el primer marionetista en recibir la Medalla al Mérito de las Bellas Artes, además de ser miembro de Honor de la Unión Internacional de Marionetas y su nombre tiene entrada propia en la Enciclopedia Mundial del Arte de la Marioneta.
La concejala de Turismo y Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Segovia, Claudia de Santos, en un texto que se puede leer en la web del museo, explica que Paco Peralta recibió indicaciones celestiales sobre “cómo debía construir hombres y mujeres pequeñitos y también caballos y ratones, si fuera su gusto”. Y al verlos acabados, “tan guapos y dulces”, se empezaron a “recetar títeres para males y penas”.
Los títeres de Peralta también se han convertido en espectadores de sesiones de cuentacuentos para niños que comenzaron a realizarse con un gran éxito de público en el último trimestre de este 2017.
Segovia forma parte de la Asociación de Ciudades Amigas de la Marioneta (AVIAMA) y con su ayuda llevará por todo el mundo, a través de citas y ferias de turismo, este cuidado y singular museo de títeres gracias a la realización de un vídeo promocional. A través de la exposición virtual de la Colección de Títeres de Peralta, llegará a todos los rincones del planeta ya que cuenta con versiones en español, inglés y francés.
Muralla medieval
La visita a la Colección de Títeres de Peralta permite descubrir otro recurso turístico de Segovia que está siendo potenciado desde el Ayuntamiento de la capital en los últimos años: la muralla, que fue declarada Monumento Histórico-Artístico en 1941. Una fortificación que data del siglo XI ya que empezó a construirse en 1088 para defender la ciudad de posibles ataques. A lo largo de los siglos, ha sufrido numerosas transformaciones pero conserva completo su trazado original.
La Puerta de Santiago, una de las entradas al recinto histórico, fue restaurada por la Fundación del Patrimonio Histórico de Castilla y León, en la que se mantuvo la línea de merlones y almenas de la primera torre medieval. Para acceder a la torre se utiliza una escalera exterior y al lado se encuentra el hermoso Jardín de los Poetas.
Patricia Martín/ ICAL