El presidente del Consejo de la Abogacía de Castilla y León (CACYL), el segoviano Julio Sanz Orejudo, recibirá este viernes 5 de marzo la Cruz Distinguida de Segunda Clase de la Orden de San Raimundo de Peñafort que le ha concedido el Ministerio de Justicia. La distinción fue solicitada por el Colegio de Abogados de Segovia y reconoce la labor de uno de los referentes de la abogacía en la Comunidad.

Premio

Las cruces de la Orden de San Raimundo de Peñafort premian “los relevantes méritos contraídos por cuantos intervienen en la Administración de Justicia, así como el cultivo y aplicación del estudio del Derecho en todas sus ramas”. En este caso, el reconocimiento hace especial hincapié en la intervención de Sanz Orejudo en defensa y apoyo de la abogacía a lo largo de su carrera.

La secretaria general para la Innovación y Calidad del Servicio Público de Justicia, Sofía Puente Santiago, entregará la medalla a Julio Sanz Orejudo tras una serie de actos que comenzarán a las 12 horas en la Sala Capitular de la Iglesia de San Justo y a los que asistirán el presidente del Tribunal de Superior de Justicia de Castilla y León, José Luis Concepción; la presidenta de la Abogacía Española, Victoria Ortega, y las principales autoridades civiles, militares y del ámbito judicial. Además, Sanz Orejudo estará arropado por todos los consejeros de la institución autonómica que preside desde hace más de siete años.

Julio Sanz Orejudo

Julio Sanz Orejudo, que lleva ejerciendo como abogado desde 1980, es uno de los letrados más reputados de la ciudad de Segovia. Ha ocupado cargos de responsabilidad en su Colegio, donde empezó como diputado primero y segundo, y culminó su carrera local como decano de 2008 a 2018. Desde 2017 preside el CACYL y es consejero del Consejo General de la Abogacía Española (CGAE). Además, forma parte de la Oficina de Representación Institucional del CGAE y es miembro de la Comisión de Ordenación Profesional y Colegial de la institución nacional.

En 1944, siendo Ministro de Justicia Eduardo Aunós, se publica en el Boletín Oficial del Estado de 7 de febrero de 1944, el Decreto de 23 de enero de ese mismo año (festividad de San Raimundo de Peñafort, patrono de los juristas) por el que se crea la Orden de la Cruz de San Raimundo de Peñafort para premiar el mérito a la Justicia y recompensar hechos distinguidos o servicios relevantes, de carácter civil, en el campo del Derecho, poniéndola bajo la advocación del que fuera eximio español y príncipe de los canonistas, San Raimundo de Peñafort.