Es una tradición en la Comunidad Autónoma, durante Semana Santa, cuando Castilla y León juega a las chapas.
Para ello, precisa la autorización de la Junta de Castilla y León que ha concedido 92 permisos a establecimientos de la Comunidad para la organización del juego de las chapas esta Semana Santa.
Se trata de una costumbre con un «fuerte» arraigo social en Castilla y León.
Se cree que tiene su origen en el sorteo que hicieron los soldados romanos de la túnica de Jesucristo antes de su crucifixión.
Esta afición consiste en el lanzamiento de dos monedas llamadas ‘perras gordas’, tradicionalmente monedas de diez céntimos de la época de Alfonso XIII. Los jugadores, reunidos alrededor de un corro que dirige el organizador del juego o ‘baratero’, apuestan en el suelo una cantidad de dinero estipulada por un jugador que hace de banca. Deben tratar de adivinar si ambas monedas quedarán en posición de caras o de cruces. Si cada una de las monedas muestra una cara diferente, se deberá repetir la jugada hasta que coincidan.
En bares de 64 municipios de Castilla y León
Las provincias de Burgos, León, Palencia, Segovia, Valladolid y Zamora contarán con puntos de juego dentro de diferentes bares repartidos por 64 municipios.
Este año se han concedido autorizaciones a 92 establecimientos, de los que 9 están en Burgos, 31 en León, 18 autorizaciones en Palencia, 26 en Valladolid, 3 en Zamora y 5 en Segovia.
En el caso de Segovia, los lugares autorizados se localizan en las localidades segovianas de Sacramenia, Cuéllar, Ayllón y Riaza.
El consejero de la Presidencia, Luis Miguel González Gago, recuerda que es una “importante seña de identidad” de la Semana Santa en muchos pueblos de Castilla y León. Por tanto, desde la Junta se apoya «esta costumbre, dando seguridad jurídica a sus organizadores, y protegiendo a los jugadores ante cualquier posible fraude o conducta dañina».
Sólo se apuesta con dinero
El reglamento regulador estipula que todas las apuestas se han de realizar con dinero líquido, impidiendo apuestas sobre bienes muebles o inmuebles, o sobre animales.
También establece la posibilidad de que el juego se desarrolle en un local cerrado o al aire libre, con los correspondientes permisos municipales, bajo la luz natural, y a más de 100 metros de cualquier centro educativo.
Entre las infracciones administrativas, se contempla como infracción grave o muy grave la organización de partidas clandestinas. También es grave o muy grave la manipulación del material de juego utilizado, el impago a los participantes de las cantidades ganadas, o las conductas desconsideradas hacia los jugadores.
Regulación de las chapas
La actividad está regulada por la Junta de Castilla y León en dos normas reglamentaria. Por un lado, el Catálogo de Juegos y Apuestas, donde se describe cómo se juega. Y, por otro, el Reglamento regulador de la actividad, donde se somete a autorización administrativa su práctica.
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