El alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, ha abogado por un gran pacto de Estado entre el Partido Popular y el Partido Socialista que nos permita ‘volver a pensar de nuevo’ España al considerar que el modelo territorial está «obsoleto, caduco y desfasado” aparte de “que no funciona”. Así lo ha dicho en relación a la medida anunciada por el Gobierno de Rajoy relativa a la reducción de los ayuntamientos. “Los ayuntamientos no son culpables del déficit de España”,asegura tras incidir en que apenas un treinta por ciento de los consistorios “están profesionalizados” mientras que el mayor porcentaje, en municipios y pequeñas localidades, están integrados por personas que trabajan de forma altruista por sus pueblos. “Son grandes ong y si fuera concejal o alcalde del Partido Popular estaría muy disgustado con estas acciones”, detalla Arahuetes.
En este sentido, Arahuetes ha considerado que es más acertada la disolución de las diputaciones así como redefinir las autonomías: “No quiero decir con ello acabar con las autonomías, o con un porcentaje limitado de políticos, ha llegado el momento de redefinir competencias y de evitar duplicidades”, “tenemos que sentarnos a pensar”, considera el regidor tras apuntar que estas acciones tendrán un “coste político” que ningún partido quiere asumir ya que sin mayoría absoluta, los dos grandes partidos siempre tienen que apoyarse para gobernar en los nacionalistas, partidos que descartan modificaciones en el modelo territorial. “Es un coste político ambos (PSOE y PP) deberían hacer un pacto de estado y de gobernabilidad» y asumir juntos el coste que pueda tener esa modificación de modelo territorial, dijo asegurando que, mientras esto no se produzca, “seguiremos señalando como culpables a los más débiles (en relación a los Ayuntamientos)”.
A este respecto, a juicio de Arahuetes, las autonomías responden a un modelo que tuvo que adaptarse en un momento determinado e hizo mención también a la importancia de modiciar, antes de los próximos comicios, la Ley Electoral porque “no pueden tener más peso 300.000 votos que 2.000.000 de votos lo que atenta al principio de igualdad” por lo que, sentenció, “algo está fallando”.
