La crisis económica afecta a todo, también a nuestro estilo de vida y, por supuesto, hace que algunos se piensen seriamente si deben o no separarse de sus parejas. Los gastos se multiplican y el bolsillo no da para más. Segovia es la provincia de Castilla y León donde se ha reducido en un mayor porcentaje el índice de separaciones, experimentándose un retroceso del 45,36 por ciento respecto a los meses de abril y junio de 2008, lo que supuso cerrar el segundo trimestre del ejercicio con 46 rupturas, frente a las 97 anteriores.
En Castilla y León, el número de parejas disueltas en el segundo trimestre de 2009 cayó en Castilla y León por encima del 20 por ciento (20,28 por ciento), respecto al mismo período del ejercicio anterior, lo que supone además una mayor incidencia que en el conjunto del país, donde el porcentaje también se redujo, aunque sensiblemente menos (el 11,8 por ciento).
En concreto, según los últimos datos publicados por el Consejo General del Poder Judicial, la cifra global de matrimonios rotos se situó en los 1.277 entre los meses de abril y junio en la Comunidad, frente a los 1.602 de 2008, lo que supone 330 menos que hace doce meses.
Así, en los juzgados de la región ingresaron 1.158 divorcios, lo que representa una caída del 21,33 por ciento respecto a los registrados en el segundo trimestre del pasado año (1.472). De ellos, 702 fueron consensuados, frente a los 456 en los que no hubo acuerdo. En España también se confirma esta tendencia a un mayor entendimiento entre las partes, con 18.240 consensuados, frente a 12.180, sin acuerdo.
Además, desde la entrada en vigor de la nueva ley del divorcio en junio de 2005, la inmensa mayoría de las rupturas matrimoniales se convirtieron automáticamente en divorcios, de hecho, en la región suponen más de 90 por ciento del total de las rupturas, y en España el porcentaje alcanza casi al 93 por ciento.
Por otro lado, las separaciones judiciales ascendieron a 128, de las que 72 fueron consensuadas, frente a las 46 restantes que no. Durante el segundo trimestre del año tan solo se registró una nulidad matrimonial, mientras que en 2008 fueron dos.