En encender un cigarrillo se tarda una media de 4 segundos. A una velocidad de 100 km/h, en ese tiempo habremos recorrido 113 metros. Encender y apagar el cigarrillo, una mano inutilizada para el volante, humo en los ojos, lumbre que se desprende, ceniza en los ojos, son elementos que provocan distracción mientras se conduce. Según un estudio de las compañías de seguro inglesas al menos el 5% de los accidentes de tráfico son directa o indirectamente atribuibles al hecho de fumar en el interior del vehículo.
Según un estudio estadounidense publicado en “Preventive Medicine”, los fumadores multiplican por 1,5 el peligro de tener un accidente de circulación y, si continuamos analizando estudios, según última encuesta realizada por Observatorio Nacional de Seguridad Vial, más del 80% de los conductores considera peligroso fumar mientras se conduce.
A fin de concienciar al conductor del riesgo de distracción que asume, la DGT pone en marcha campañas recomendando no fumar mientras se conduce.entre los día 5 y 18 de marzo. Esta campaña se realizará a través de la divulgación de mensajes en medios de comunicación y de intensificación de controles en las carreteras, tanto por parte de los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, como de los agentes de las Policías Locales de los ayuntamientos adscritos a la campaña. Se incidirá sobre el uso de teléfonos móviles y otras conductas que provocan distracción, como el uso del navegador mientras se conduce, con la intención de trasladar a la sociedad la idea de que hay que mantener en todo momento la atención en la compleja tarea que supone la conducción.
Los controles en las carreteras se acompañarán con la emisión de cuñas divulgativas en radio, anuncios en prensa y mensajes en los paneles de información en carretera.
En el pasado año 2011, la distracción aparece como la primera causa de producción de accidentes de tráfico mortales en carretera, por delante de las infracciones a las normas de circulación, estando presente, como factor concurrente, en un 50,70 % de los mismos.
El accidente más frecuente, es la colisión, muy relacionado con la falta de atención durante la conducción. En la accidentalidad del año 2011 en este tipo de accidente, la falta de atención fue un factor concurrente en el 52,78 % de los mismos.
La desatención a la conducción suele producirse por acciones que se realizan a la vez que se conduce. Una conversación por el teléfono móvil, aunque sea con el manos libres, fumar, manipula aparatos instalados en el automóvil, como navegadores o reproductores de música, suelen ser los hechos que concurren con mayor frecuencia como factores desencadenantes de los accidentes.