La directora del Festival Internacional de Títeres de Segovia, Marian Palma, avanzó que plantean un Titirimundi, para la semana del 22 al 27 de septiembre, con 31 compañías de 10 países de la Unión Europea, entre ellas, 17 españolas. Encima de la mesa, el equipo de Titirimundi sigue teniendo muchas preguntas e incertidumbres pero un objetivo claro, “adaptarse” e ir resolviendo lo que “venga día a día”, en tiempos marcados por la incertidumbre.
“Pueden pasar mil historias”, resumió la directora de Titirimundi, “junio va a ser nuestro febrero que es cuando se cierra todo, los contratos, el programa, la maquetación, etc”. Ahora, a todo el equipo de trabajo del festival, no les queda más remedio que hacer todo tipo de planes para tener contemplados todos los escenarios posibles, en previsión de las decisiones que se vayan tomando.
Una vez consultada y cerrada la nueva fecha de celebración de Titirimundi, del 22 al 27 de septiembre, tras la celebración del Hay Festival Segovia, se pusieron en contacto con todas las compañías para ver sus posibilidades de confirmación tanto para las funciones en la ciudad de Segovia como en la gira por otros puntos.
Marian Palma explicó que encontró una gran receptividad en el diputado provincial de Cultura, José María Bravo para trasladar a septiembre la gira de espectáculos de Titirimundi en 50 municipios. En Castilla y León, ya confirmaron para tener funciones titiriteras León, Salamanca o Burgos, así como varios municipios de la Comunidad de Madrid y de Navarra. “Sorprendida para bien con la respuesta de todo el mundo con las fechas propuestas hemos arrastrado un montón de programación que esperamos se pueda realizar”, subrayó Marian Palma.
Del 30 al 70% de aforo
La prudencia marca su calendario de trabajo porque tienen claro que la sanidad “va por delante de todo” y le darán las vueltas que haga falta a la cabeza para adaptarse a las restricciones que se imponga en los espacios bien sean cerrados, en los patios y para las funciones de calle. “Estamos estudiando cada uno de ellos, los planos, los alzados, las distancias, preferimos ser prudentes y trabajar así”, resaltó la directora de Titirimundi.
Se están mirando cada uno de los lugares con las tres alternativas de aforo que están en las fases de la desescalada, con el 30, el 50 o el 70 por ciento. Los responsables de Titirimundi no renuncian a su esencia de estar con el teatro de títeres en la calle, analizando cómo poder ubicar a la personas manteniendo todas las medidas de seguridad para controlar al público. Más sencillo serán los patios que son espacios controlados, con una puerta de acceso y poder colocar las sillas con dos metros de separación.
Marian Palma insistió en que se centraron en compañías de países de la Unión Europea o de artistas que se encontraban en el viejo continente cuando comenzaron las restricciones de movilidad por la pandemia del coronavirus, como un artista israelí que le pilló trabajando en Alemania. Titirimundi 2021 ya tiene cinco compañías confirmadas, entre ellas una de Mali y otra de Chile, que por razones obvias no estarán en la cita programada para septiembre.
La presencia de las compañías, argumentó la directora del festival segoviano, dependerá de las aperturas de las fronteras entre los países para los viajes en avión y también por carreteras. Los compromisos que estaban cerrados se irá viendo cuando pueden ser más viables, ya que nadie es responsable de “esta situación dantesca” y “todo se pueda hablar aplazando compromisos para ediciones futuros”, explicó Marian Palma.
En cuanto al presupuesto económico, con la Junta de Castilla y León firmaron el convenio el año pasado; con la Diputación, la gira provincial ya está confirmada, y con el Ayuntamiento, ya está hablando para firmar el convenio durante los próximos días. La incertidumbre está con el Ministerio de Cultura, no tiene en marcha ninguna convocatoria de ayudas.
Llevar la primavera a septiembre
Titirimundi buscará, dijo Marian Palma, citando a uno de los titiriteros con los que ha estado hablando estos días, tienen que mantener su espíritu, ganas e ilusión para llevar la primavera hasta finales del mes de siempre para animar al público, tocado en muchos sentidos, laboral, económico o anímico.
El Festival de Títeres de Segovia no pondrá contar con uno de sus iconos, el carrusel a los pies del Acueducto, ya que los responsables de la compañía francesa tiene comprometidas ya esas fechas en las ciudades de Nantes y Marsella. Sí contará con siete colegios que sí o sí mostrarán sus montajes de teatro de títeres a otros estudiantes, en una nueva edición de Titiricole.
La directora de Titirimundi afirmó que tuvieron que “desmontar” un festival completamente montado para este mes de mayo. En estos días, si el Covid-19 no hubiera arrasado con todo, ya habría funciones en los pueblos y el carrusel ya estaría dando vueltas a los pies del Acueducto. Marian Palma recordó que las semanas antes del decreto del estado de alarma en España, conocían las noticias que les llegaban por compañías asiáticas e tialinas.
“Vimos que no era ninguna broma y que el coronavirus venía para caer sobre nosotros como un tsunami”, resumió. De hecho, el 12 de marzo tomó la decisión tajante de no enviar la maquetación del programa definitivo de Titirimundi para su impresión a gran escala y así se lo transmitió al director técnico y al personal de la organización. “Les dije no lo vamos a enviar porque sólo va a servir para encender chimeneas”, remarcó la directora del festival, y evitar así hacer frente a un gran desembolso económico.
Además, desde Titirimundi, hablaron con las compañías internacionales para que pararan todos los procedimientos administrativos y burocráticos de visados y documentos para los viajes internacionales. Marian Palma resumió que lo pararon todo en espera de ver qué solución tomaban.