El Consejo General de Enfermería y diferentes plataformas de pacientes solicitaron al Ministerio de Sanidad y a las comunidades autónomas la implantación de la enfermera escolar en todos los centros el próximo curso. “Es una figura muy importante en la nueva normalidad”, subrayó el presidente de la organización, Florentino Pérez Raya.
El Consejo lidera un posicionamiento en esta línea, junto a otras organizaciones como la Federación Española de Diabetes (FEDE), la Plataforma de Pacientes (POP), la Asociación Nacional e Internacional de Enfermería Escolar (AMECE), la Asociación Científica Española de Enfermería y Salud Escolar (ACEESE), la Associació Catalana D’infermeria I Salut Escolar (ACISE), la Escuela Superior de Enfermería del Mar (ESIMar) y la Asociación de Investigación en Prevención y Cuidados Comunitarios (PRECUICOM), Grupo PAIDI Innovación en Cuidados.
Aseguran que los centros educativos “han jugado un papel fundamental en la promoción y educación de la salud, así como en la prevención de enfermedades a través de la participación de toda la comunidad educativa”. “Ahora, con la situación de pandemia por el COVID-19, su función es esencial”, comentó Pérez Raya, quien instó a impulsar un procedimiento común a todas las comunidades para instaurar la figura de la enfermera escolar, “garantizando que las necesidades de salud y sanitarias de los menores sean atendidas dentro del ámbito escolar y participando activamente en políticas sanitarias, así como realizando promoción y prevención de la salud en los centros escolares desde las edades más tempranas y para toda la comunidad educativa”, añadió.
A su juicio, “los servicios de enfermería en los centros educativos son una necesidad para las niñas y niños con enfermedad crónica y una oportunidad de introducir la cronicidad como parte de la gestión de la diversidad en los colegios”, señaló la presidenta de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP), Carina Escobar. “Se podrían trabajar temas como los hábitos saludables y dar información y concienciar acerca de las patologías presentes en los alumnos”, psoriguió. En este sentido, aseguró que “contando con un servicio de enfermería sería también posible tratar la sintomatología o brotes de enfermedades crónicas de estos niños, así como suministrarles el tratamiento oportuno a través de profesionales capacitados, de manera que no tengan que ser los padres quienes acuden al centro escolar”.
Por último, el presidente en funciones de la Federación Española de Diabetes (FEDE), Aureliano Ruiz, explica que la figura del profesional de enfermería escolar “proporciona una seguridad para el colectivo de niños con diabetes en las aulas”. En este sentido, “es clave para la atención sanitaria que requieren los menores con diabetes tipo 1, para el buen control de su patología; y también para sus padres, a los que les proporciona tranquilidad”. Sin embargo, lamentó que en España el número de profesionales de enfermería que realizan su actividad dentro del ámbito educativo es “muy escaso”, motivo por el que reivindicó su presencia para la atención de los menores.