La nota media de los alumnos que superaron las asignaturas obligatorios de la EBAU (Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad) el año pasado en Castilla y León fue un 6,71 sobre diez, por lo que obtuvieron la segunda mayor calificación de España, solo superada por los estudiantes de Murcia (6,72). A continuación, aparecieron las notas de las comunidades de Aragón (6,69); Canarias y Extremadura (6,65 en cada caso) y País Vasco (6,64). Por el lado contrario, se situó Baleares, que con un 5,88, obtuvo la calificación más baja.

Según los datos del Ministerio de Universidades consultados por la Agencia Ical y en vísperas de que arranque la convocatoria ordinaria de la EBAU que se prolongará entre mañana miércoles y el viernes, los estudiantes de Castilla y León que en 2019 superaron las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU) en la fase ordinaria en junio obtuvieron la mejor nota del país, con un 6,91, por delante de Extremadura (6,88); Murcia (6,85); Canarias (6,81); Aragón (6,80) y País Vasco (6,74).

En la cuanto a la fase extraordinaria de septiembre del año pasado, la nota media de los aprobados en Castilla y León fue del 5,53, entre las más bajas del país, que fueron lideradas por Galicia (5,12) y Castilla-La Mancha (5,14) mientras que Baleares no pasó el corte, al quedarse en el 4,95. Por el contrario, Aragón (5,77); País Vasco (5,65); Murcia (5,64) y Cantabria (5,60) contabilizaron las calificaciones más elevadas.

Los estudiantes deben someterse a un bloque obligatorio de la PAU, que se conoce como fase general y está compuesto de cuatro exámenes. En cuanto a las materias obligatorias son Lengua castellana y Literatura, Historia de España, Lengua extranjera y una asignatura troncal en función del itinerario del Bachillerato cursado: Matemáticas II (rama Ciencias), Matemáticas aplicadas a las Ciencias Sociales (Ciencias Sociales), Latín II (Humanidades) y Fundamentos de Arte II (Artes). Por lo tanto, la nota media de la fase general sale de las calificaciones que obtienen los estudiantes en los exámenes de estas cuatro materias.

Además, el examen contempla una fase voluntaria para los alumnos que deseen elevar su nota de admisión a las distintas titulaciones que ofrecen las universidades, hasta un máximo de cuatro materias. Deberán elegir entre las troncales generales que no hayan realizado en el bloque obligatorio (Matemáticas II, Matemáticas de Ciencias Sociales, Latín y Arte) y entre las asignaturas opcionales (Biología, Geología, Física, Química, Dibujo Técnico, Geografía, Historia del Arte y Artes escénicas, entre otras).

Este bloque no es obligatorio pero esas notas servirán para mejorar la cualificación final, hasta un máximo de 14. De ahí que, los estudiantes que deseen cursar carreras con una alta nota de corte, como por ejemplo Medicina o algún grado doble, deben examinarse de todas las materias.

El estudiante superará la EBAU si la media aritmética de las calificaciones de las materias generales del bloque de asignaturas troncales es cuatro o superior. Esta nota supondrá el 40 por ciento de la calificación para acceder a la universidad mientras que el otro 60 por ciento corresponderá a la nota de la etapa de Bachillerato.

Todo hace indicar que las calificaciones que obtendrán los alumnos de la Selectividad este año serán mayores a las de otros cursos después de que la consejera de Educación, Rocío Lucas, haya anunciado que el sistema de evaluación de la EBAU será “mucho más flexible” que en convocatorias precedentes, con un aumento “notable” de la opcionalidad para los alumnos, adaptándose así a las circunstancias generadas por la incidencia de la pandemia por el coronavirus.

De esta manera, se garantizará que el alumno pueda escoger los contenidos adquiridos antes de la pandemia y puso como ejemplo una prueba de Lengua y Literatura, que es obligatoria para todos los alumnos. “Se simplifica la misma y se aumenta la opcionalidad”, confirmó la consejera, quien ejemplificó que si el año pasado había una única posibilidad de tema para desarrollar por parte de los alumnos, en esta ocasión podrán elegir “un tema entre tres”.

Quinta comunidad en sobresalientes

Pese a que los alumnos que el año pasado superaron la EBAU en Castilla y León obtuvieron la segunda mejor nota media de España, quedaron relegados al quinto puesto en el porcentaje de estudiantes que obtuvieron sobresaliente en las asignaturas obligatorias. En concreto, el 5,2 por ciento de los castellanos y leoneses que superaron la prueba logró la máxima calificación, un porcentaje que fue superado por Extremadura (7,16 por ciento); Murcia (5,85 por ciento); Canarias (5,48 por ciento) y Asturias (5,39 por ciento). A la cola en esta estadística, según las tablas consultadas por Ical, aparece de nuevo Baleares (0,97 por ciento), seguido de Valencia (1,17 por ciento) y La Rioja (2,23 por ciento).

La Junta de Castilla y la mayor parte de la comunidad educativa de la Comunidad llevan años con la demanda para la implantación de una EBAU única y simultánea para toda España con el objetivo de que todos los estudiantes tengan igualdad de oportunidades a la hora de elegir un grado universitario. No en vano, la existencia de 17 selectividades genera que siempre haya unos exámenes más fáciles que otros. En la actualidad, los estudiantes castellanos y leoneses se enfrentan a una Selectividad más difícil que en otras comunidades donde el nivel académico es inferior, lo que tiene su incidencia en unas notas más bajas.

El alto nivel educativo de Castilla y León queda demostrado en las tasas de graduación finalistas en ESO y Bachillerato pero también en los resultados de evaluaciones externas como Pisa (que mide los conocimientos de los alumnos en Matemáticas, Ciencias y Lectura), Pirls (comprensión lectora) y Timss (Matemáticas y Ciencias).

Además, el porcentaje de aprobados en la fase general de la EBAU con respecto a los alumnos presentados en la Comunidad es superior a la media nacional. En la prueba del año pasado, con la participación de 11.700 estudiantes, esa tasa se situó en el 94 por ciento frente al 91,7 por ciento de España. La diferencia siempre se sitúa entre dos y cuatro puntos, a favor de la región. Unos porcentajes que aumentaron en la fase ordinaria de junio en Castilla y León hasta el 96,2 por ciento y el 94,4 por ciento en el conjunto del país.

Un 26% más de matriculados

En 2019, la cifra de matriculados en la EBAU en la fase ordinaria ascendió a 9.283 pero este año, tras un tercer trimestre sin enseñanza presencial por la pandemia del COVID-19, el número de estudiantes que realizará la prueba de acceso a la Universidad aumentará un 26,7 por ciento en la Comunidad, hasta los 11.768 del actual, según los datos facilitados por la Consejería de Educación a Ical.

Además, este incremento de 2.485 alumnos que se presentarán a la prueba de acceso a la universidad se produce en medio de un descenso del número de estudiantes de Bachillerato en Castilla y León. Mientras en el pasado curso fueron 35.569 los matriculados en ambos cursos del Bachillerato, en el presente esta cifra se redujo hasta los 32.400 (-3.169), caída que en términos porcentuales supone un 8,9 por ciento.