El Sindicato de Enfermería, SATSE Castilla y León, ha reclamado a todas las administraciones públicas que destinen más recursos para fomentar la educación y formación en igualdad, al considerar que es la mejor manera para prevenir los casos de violencia contra la mujer que se siguen produciendo en nuestro país.

Con motivo de la celebración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, SATSE manifiesta su compromiso con la lucha contra esta grave lacra social y se ha sumado, un año más, a la campaña impulsada desde las Naciones Unidas que, bajo el lema “Pinta el mundo de naranja: Generación igualdad se opone a la violación», busca informar y sensibilizar sobre este grave problema de salud pública que afecta a una de cada tres mujeres en el mundo.

El Sindicato de Enfermería considera que, pese a los avances experimentados para acabar con las situaciones de discriminación por razón de género, aún resulta muy necesario ir “a la raíz del problema” e impulsar la educación y formacion en igualdad, tanto en la población en general como en el caso de las y los profesionales sanitarios. De igual manera, subraya la importancia de incidir especialmente en la sensibilización y concienciación sobre la violencia machista entre jóvenes y adolescentes.

Al respecto, SATSE incide en que, además de su trabajo en Atención Primaria y Especializada en la detección y atención de los casos de violencia de género, las enfermeras y enfermeros pueden realizan una labor fundamental en materia de formación y educación en igualdad a personas adultas y, especialmente, a los niños, niñas y jóvenes.

En este sentido, reclama la presencia de enfermeras y enfermeros en todos los centros educativos para que, a través de charlas, talleres y otras actividades formativas, puedan educar en la igualdad, rompiendo mitos y estereotipos sobre roles de género impuestos y poniendo ejemplos reales y comprensibles para los niños, niñas y adolescentes.

Asimismo, el Sindicato demanda una mayor formación de las enfermeras y enfermeros, ya que un mejor conocimiento de las causas, tipos y consecuencias de la violencia de género permitirá identificar los signos, síntomas y conductas, así como las fases del proceso de cambio en la mujer víctima de este grave problema.

Al respecto, SATSE defiende la generalización de la formación continuada en materia de violencia de género para que las y los profesionales sanitarios cuenten con todas las herramientas necesarias para mejorar la intervención y ayuda a estas mujeres, como el conocimiento de los protocolos de actuación sanitaria existentes, los recursos disponibles o los derechos de las mujeres agredidas.

De otro lado, el Sindicato de Enfermería insiste en que la detección precoz de un caso de violencia de género por parte de la enfermera o enfermero propicia realizar una intervención temprana, algo que es fundamental en estos casos. En este sentido, añade que la relación de cuidado que se establece entre las enfermeras y sus pacientes permite valorar de forma integral a la persona y a su entorno familiar y social, así como las consecuencias para los hijos e hijas de las mujeres maltratadas, los cuales sufren en todos los casos algún tipo de secuela física o psíquica.

Por último, desde la organización sindical se remarca que las enfermeras y enfermeros tienen también un papel fundamental a la hora de dar visibilidad a las mujeres más vulnerables y con dificultades en el acceso a servicios de apoyo por limitaciones físicas o psíquicas, especialmente en aquellos casos en los que la mujer no reconoce la situación de maltrato, así como su labor interviniendo sobre las manifestaciones de los distintos tipos de violencia, ya que supone un avance en la lucha contra la erradicación de este grave problema.