Castilla y León registró hoy el primer día en meses sin brotes activos de COVID-19 en residencias de mayores, si bien la situación epidemiológica sigue deteriorándose puesto que casi todos los indicadores presentaron una evolución negativa, con subidas en la incidencia acumulada a 14 días, hasta los 124,47 casos por cada 100.000 habitantes, frente a los 121,57 de ayer, al igual que la de la última semana que pasó de 65,60 a 67,31 positivos, informa Ical.
Al respecto, el vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea, aseguró en su cuenta de Twitter que “todos los indicadores continúan deteriorándose”, por lo que llamó a la población a evitar las “multitudes”, así como a mantener la distancia y usar la mascarilla. “No permanezcas en espacios cerrados o mal ventilados”, añadió, para recordar que 420 enfermos de coronavirus siguen hospitalizados -303 en planta y 117 en la UCI-.
También, el doctor Ignacio Rosell, secretario del comité de expertos que asegura a la Junta, expresó su “preocupación” porque sigue subiendo la incidencia del COVID-19 en Castilla y León, con algunos territorios en riesgo “muy alto”. No obstante, destacó como dato para la “esperanza” que no haya brotes activos en residencias.
De esta forma, según los datos facilitados por la Consejería de Sanidad, la provincia de Soria sigue en riesgo muy alto al tener una incidencia a 14 días de 253,14 casos por cada 100.000 habitantes, mientras se encuentran en riesgo alto Burgos (215,57), Segovia (214,36) y Palencia (208,33). Otras tres están en riesgo medio: Valladolid (102,95), León (84,79) y Salamanca (79,88) y dos más en bajo: Zamora (45,14) y Ávila (37,42).
En cuanto a la incidencia acumulada de la última semana, de nuevo Soria es la única provincia en riesgo muy alto con 126,01 casos. Le siguen en riesgo alto Segovia (124,45), Burgos (116,59) y Palencia (96,06) y en medio las provincias de Valladolid (60,12), León (45,35), Salamanca (41) y Zamora (28,72). Destaca Ávila con 21,56 casos, cifra que sitúa a la provincia en riesgo bajo.
También se produce un aumento en la tasa de incidencia acumulada de casos de COVID-19 en mayores de 65 años, puesto que frente a los 81,15 casos en las últimas dos semanas y 45,15 en lo referente a los pasados siete días, se ha pasado hoy a 82,61 y 47,91 respectivamente.
UCI y planta
La ocupación de camas en las UCI de los hospitales de Castilla y León por pacientes de COVID-19 volvió a crecer ligeramente hasta los 22,63 por ciento, frente a los 22,44 de este domingo. No obstante, en la actualidad solo los hospitales de la provincia de Salamanca se encuentran en riesgo bajo en cuanto a la ocupación de pacientes COVID en las UCI extendidas, al suponer el 6,76 por ciento del total de camas habilitadas.
En riesgo alto se ubican las unidades de críticos de los hospitales de Ávila (16,67 por ciento), Burgos (20,22), Zamora (21,05) y León (16,84), y en muy alto cuatro: Segovia (29,03), Palencia (30,11), Valladolid (31,54), y Soria (32).
En lo que respecta a la ocupación en planta, actualmente la Junta notifica un 5,13 por ciento. Sólo Soria esta en riesgo alto con un 12,27 por ciento, mientras en un escalafón medio se sitúan Valladolid (6,84), Burgos (6,18) y Segovia (5,85), y en el resto en un estadio bajo, excepto Zamora, que con un 1,92, tiene un valor propio de la nueva normalidad.
Índice reproductivo
El índice de reproducción del virus se mantiene en el 1,13 de media en Castilla y León. Siete provincias superan ampliamente el máximo recomendado por las autoridades sanitarias de uno. Están son: Valladolid (1,34), Segovia (1,21), Ávila y Zamora (1,19); Burgos (1,15); León (1,14) y Salamanca (1,03). Solo por debajo del uno se sitúan Palencia (0,94) y Soria (0,9).
Finalmente, la positividad global de las pruebas diagnósticas marca hoy un 6,68 por ciento, y el porcentaje de casos con trazabilidad registra un 71,63 por ciento-.