Aves rapaces en un centro de recuperación de animales silvestres (CRAS) de Castilla y León

Buitres leonados, cigüeñas blancas, busardo ratonero… A lo largo de 2021, los centros de recuperación de animales silvestres (CRAS) recibieron 6.237 ejemplares de especies de fauna silvestre, de los cuáles 3.640 estaban vivos, 2.284 cadáveres y 313 entradas correspondieron a controles poblacionales de visón americano. Segovia es la cuarta ciudad con más ingresos de este tipo de animales.

Así lo señala una nota de prensa de la Junta de Castilla y León, en la que se remarca que desde 2017, se ha registrado un incremento de casi el 34 por ciento de ingresos de ejemplares vivos y de aproximadamente el 21 por ciento de ingresos de cadáveres. Durante 2021, del total de ingresos de ejemplares vivos se han podido liberar más de la mitad (52 por ciento), siendo este porcentaje similar al de años anteriores.

La mayoría de los ingresos son aves, que supusieron el 87 por ciento de las entradas, seguidos de un once por ciento de mamíferos. El busardo ratonero, el buitre leonado, el vencejo común, la cigüeña blanca, el cernícalo vulgar y el milano real fueron las especies de aves que más ingresaron en los CRAS.

Atropellos, traumatismos

De los más de 6.000 ejemplares recogidos, el 27 por ciento fue pollos y crías de mamíferos; otro 20 por ciento fue por traumatismos indeterminados, como electrocuciones y colisiones con tendidos eléctricos, 874 casos; y el nueve por atropellos, 559 ejemplares. Otras causas significativas de mortalidad no natural de fauna silvestre fueron las colisiones con aerogeneradores, el seis por ciento de las entradas, y los disparos, con 90 ejemplares ingresados.

En relación a los ingresos de especies amenazadas en la red de Centros de Recuperación de Castilla y León el año pasado, fueron 375 ejemplares, incluyendo tanto ejemplares vivos como muertos, destacando por su número 219 ejemplares de milano real, 60 de aguilucho cenizo, 39 de buitre negro y 25 de águila imperial. Con cifras menores aparecen los ingresos de seis águilas perdiceras, cinco cigüeñas negras, cinco alimoches, tres urogallos y dos osos pardos.

Por provincias

Las provincias que registraron mayor porcentaje de ejemplares recibidos en la red de Centros de Recuperación de Castilla y León fueron Burgos (1.631 ejemplares) y Valladolid (1.533 ejemplares), con cerca del 25 por ciento de las entradas cada una de ellas, seguidas de Salamanca (1.069 ejemplares) y Segovia (716 ejemplares). Con números significativamente menores aparecen Soria (349 ejemplares), Zamora (329 ejemplares) y Ávila (314 ejemplares), representando cada una de ellas en torno al cinco por ciento del total. Finalmente, desde León y Palencia se han recibido en la red de CRAS 263 y 223 ejemplares, respectivamente.

Voladero elíptico

Una importante novedad durante el año pasado fue la inauguración en el CRAS de Valladolid de un voladero elíptico de 45 metros de largo y 5 metros de ancho, donde se lleva a cabo la propia musculación de las aves con el fin de asegurar el éxito en su reintroducción en el medio natural. El voladero elíptico dispone de ocho boxes interiores y un box especial para especies de gran envergadura, todos ellos con un sistema de trampillas para facilitar la salida del ejemplar al túnel de entrenamiento. Gracias a los entrenamientos en el voladero elíptico, se ha observado una mejoría en relación con la fuerza de vuelo que presentan los ejemplares en su liberación, así como un acortamiento de su estancia en los centros.

Valladolid, Burgos y Segovia

Castilla y León cuenta con tres Centros de Recuperación -en Valladolid, Burgos y Segovia- y dos Centros de Recepción -en Zamora y Salamanca-. Todos ellos desarrollan labores de recuperación de aquellos animales que presentan situaciones de fácil tratamiento.

En los Centros de Recuperación de Animales Silvestres se realizan las labores de rehabilitación de aquellos ejemplares que resultan heridos como consecuencia de algún accidente, y de investigación de las causas de mortalidad en animales silvestres.

También realizan una importante labor en el seguimiento del estado sanitario de la fauna silvestre regional y en la implementación de medidas de concienciación y sensibilización de la sociedad hacia la conservación de las especies de fauna silvestre, colaborando además en determinados proyectos de investigación y de conservación de la biodiversidad.

Toda la labor que se realiza en los centros se complementa con el programa de voluntariado instaurado en los CRAS de Valladolid y Burgos y en el centro de recepción de Salamanca, que se desarrolla durante los periodos con mayor número de ingresos, desde junio a septiembre.