El aumento de los contagios de COVID-19 no solo se está produciendo en las ciudades grandes, sino que se extiende al medio rural de Castilla y León, lo que pone en vigilancia un total de 24 zonas básicas de salud.

Además, las capitales de provincia se encuentran todas en “riesgo extremo” de expansión del coronavirus, con Palencia y León a la cabeza, al registrar con 827 y 816 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos cinco días.

En la comparecencia posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, la titular de Sanidad analizó la situación epidemiológica del COVID en Castilla y León, donde apuntó crece la presión sobre los hospitales, con 1.217 enfermos COVID –157 en las unidades de cuidados intensivos, con una media de 63 años-. Esto supone una ocupación en planta del 19 por ciento y en las UCI extendidas del 37 por ciento.

Las zonas básicas de salud que más preocupan a la Junta son: Belorado y Melgar de Fernamental (Burgos); Astorga, Mansilla de las Mulas, Ribera del Órbigo y Villablino (León); Aguilar de Campoo, Cervera de Pisuerga, Guardo y Villamuriel de Cerrato (Palencia); Guijuelo, Periurbana Norte y Periurbana Sur en Salamanca; Carbonero el Mayor (Segovia); Ólvega (Soria); Medina de Rioseco, Peñafiel, Serrada, Cigales y Valladolid Rural I, y Benavente, Corrales del Vino, Villalpando y Zamora sur.

En concreto, sobre las zonas en las que están vigentes las medidas restrictivas y el confinamiento perimetral, hasta que se adopten otras nuevas, se mantiene una tendencia «al alza» en las ciudades de León, Salamanca, Burgos y Palencia, mientras en Aranda de Duero comienza “a crecer con menor intensidad» el número de contagios y en Miranda de Ebro está “disminuyendo progresivamente” la incidencia. En San Andrés del Rabanedo (León) se registra un “descenso lento” de casos. 

Igualmente, sobre la provincia de Valladolid, la consejera precisó que en Medina del Campo sigue disminuyendo «a buen ritmo» la incidencia del coronavirus. En la población de Íscar, se ha producido una disminución de casos “considerablemente, si bien en Pedrajas de San Esteban, mantiene una evolución “favorable”, pero todavía tiene tasas de 500 positivos por cada 100.000 habitantes. Además, San Pedro de Latarce presenta una tendencia “muy favorable” en los últimos diez días “sin apenas casos”.

Respecto a las capitales de provincias, en los últimos cinco días la tasa de incidencia por cada 100.000 habitantes se situó en Ávila en 401,77 casos; en Burgos, en 613,69; en León, en 816,55; en Palencia, en 827,68; en Salamanca, en 732,87; en Segovia, en 325,12; en Soria, en 192,9; en Valladolid, en 489,26, y en Zamora, en 379,44. También Ponferrada, añadió la consejera de Sanidad, se rebasaron los 500 casos ayer.

En cuanto al índice de reproducción del virus, Verónica Casado señaló que en Castilla y León es del 1,19, con todas las provincias por encima del uno. Así, en Ávila es de uno; en Burgos, del 1,21; en León, del 1,13; en Palencia, del 1,32; en Salamanca, del 1,15; en Segovia, del 1,04; en Soria, del 1,65; en Valladolid, del 1,22, y en Zamora, del 1,32.

Precaución

Por todo ello, la consejera de Sanidad pidió a los ciudadanos, tanto de grandes municipios, como del medio rural, que extremen las precauciones. Verónica Casado insistió en la necesidad de frenar los contagios, porque sin ellos no hay enfermedad, “ni leve, ni moderada, ni severa”, que lleve al ingreso en los hospitales de la Comunidad.

Finalmente, la titular de Sanidad remarcó el aumento de las pruebas PCR y de antígenos, con 46.075 en la última semana, es decir, 11.230 más -9.500 PCR-.