El fin del confinamiento, la libre circulación entre provincias y la llegada del periodo vacacional incrementarán el número de viajes en moto en las próximas semanas. El expiloto profesional Álex Crivillé, plantea al colectivo motero unos tips sobre conducción responsable y segura, bajo la máxima: “la carretera no es un circuito”. El embajador de AMV (empresa líder en la comercialización de seguros de moto), prioriza la aptitud y formación necesaria para dominar las técnicas de conducción, así como la actitud del motorista para aplicar el sentido común, la prudencia y la concentración durante todo el trayecto.
Álex Crivillé resume en estos 5 puntos sus recomendaciones para un viaje cómodo y seguro:
1. MOTO A PUNTO: Es recomendable una visita previa al taller de confianza para revisar todos los elementos de seguridad activa de la moto, incluyendo la batería y la transmisión. Si esta no es posible, conviene que nosotros mismos verifiquemos el estado y nivel de aceite del motor, del líquido refrigerante, la presión y desgaste de los neumáticos, el estado de la amortiguación y de los frenos (incluyendo el líquido), así como el funcionamiento de las luces.También hay que comprobar que no hay ninguna fuga de líquidos y, por supuesto, llenar el depósito de combustible.
2. EQUIPAMIENTO MOTERO: Durante el verano se pueden producir lesiones, al no estar concienciados de que, a pesar del calor, en la moto siempre hay que llevar un equipamiento adecuado. Además del uso obligatorio del casco, es imprescindible usar guantes y un buen calzado con protecciones, especialmente diseñados para motoristas. Adicionalmente, es recomendable llevar chaqueta y pantalón dotados de protecciones y con un tejido transpirable e impermeable. Procuraremos elegir un equipamiento de colores llamativos o que cuente con inserciones reflectantes para que nos hagan más visibles ante otros conductores durante nuestro viaje.
3. EQUIPAJE IMPRESCINDIBLE:Además del móvil con la carga de batería completa y de un navegador que facilite la ruta, no debemos olvidar llevar a mano nuestra documentación y la de la moto (carnet de conducir, el permiso de circulación y la tarjeta de inspección técnica de vehículos en vigor), añadiendo la relativa al seguro.
Debemos completar nuestro equipaje con un chaleco reflectante por si tenemos que realizar una parada de emergencia, gafas o lentillas de repuesto si se utilizan habitualmente, un pequeño botiquín de pequeños auxilios, un kit básico de reparación y antipinchazos y un juego de lámparas.
No conviene sobrecargar la moto para no perjudicar su estabilidad y maniobrabilidad, colocando lo más pesado en la bolsa del depósito y lo más liviano en el baúl trasero.De esta manera no se verá comprometido su centro de gravedad.
En el caso de la ropa, lo doblaremos de tal forma que ocupe el menor espacio posible.Si bien los complementos y accesorios de carga suelen destacar por su impermeabilidad, guardaremos la ropa y el calzado en bolsas de plástico estancas para evitar que lleguen a mojarse en el supuesto de que exista una filtración de agua.
Antes de empezar a cargar, es conveniente saber cuántos kilos podremos transportar en cada complemento o accesorio y cuál es el peso máximo que podrá soportar el vehículo con pasajeros y carga. De esta manera evitaremos propiciar la fatiga en nuestro viaje en moto.Una vez que hayamos repartido la carga, tendremos que verificar que el equipaje queda bien sujeto en el interior de los complementos o accesorios y que estos, a su vez, se han fijado correctamente a la moto.
4. PREPARACIÓN FÍSICA Y DISPOSICIÓN PSÍQUICA: Un viaje en moto supone un desgaste. Lo ideal es salir a la carretera descansado y hacer una parada aproximadamente cada 150 km. para comer algo ligero, hidratarse,estirar las piernas y reponer fuerzas. Hay que estar concienciado en todo momento de los factores externos que influyen en la seguridad y ser consciente del estado y de las condiciones de la vía por la que se circula.
5. LA CARRETERA NO ES UN CIRCUITO:Independientemente de la velocidad a la que se circule, hay que estar alerta permanentemente y vigilar la disposición correcta del cuerpo, de las manos y de los pies, por dónde circular, realizar correctamente los giros y, sobre todo, rodar tranquilo y frenar adecuadamente.Si se viaja en grupo conviene no rodar en fila india en las rectas, mejor en formación de zig-zag, para tener visibilidad más allá de quién va delante y así facilitar que ese piloto también sepa en todo momento dónde te encuentras.
La planificación de la ruta vacacional por CASTILLA Y LEÓN:
Ruta de la Peña de Francia
La Ruta de la Peña de Francia es un itinerario de 250 kilómetros, que ofrece un magnífico recorrido para los que decidan conjugar moto con parajes naturales. Para aquellos que no han planificado las vacaciones moteras de verano, esta puede ser una excelente opción tras el confinamiento, para disfrutar de espacios abiertos y aire puro.
El recorrido parte de la imponente Salamanca, ciudad que merece ser disfrutada con calma por su inabarcable patrimonio cultural y arquitectónico, así como por su ambiente. No en vano fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Recomendamos dejar la moto aparcada en los parkings ubicados en la entrada de la ciudad y pasear por su maravilloso casco antiguo. Son muchos los atractivos que atender, pero es de visita obligada la Plaza Mayor, el conjunto catedralicio, la Casa de las Conchas y el Edificio Histórico de la Universidad, en cuya fachada debes encontrar la figura de la rana. No olvidar degustar los productos de la tierra: jamón de Guijuelo, las carnes de ternera o morucha, las lentejas de la Armuña, la chanfaina, los asados, acompañados con quesos, aceites y vinos salmantinos.
Podemos continuar ruta hacia Linares de Riofrío, denominado Puerta de la Sierra de Francia, que se sitúa a 950 metros sobre el nivel de mar, por lo que cuenta con un clima característico que moldea un peculiar entorno paisajístico y proseguir la ruta hacia Miranda del Castañar. Este pueblo pertenece al selecto club de los «Pueblos más bonitos de España” y fue declarado Conjunto Histórico Artístico en el año 1973, por lo que también es recomendablebajar de la moto para adentrarse en él.
AMV propone continuar viaje hacia La Alberca, una de las localidades más pintorescas de España y primer pueblo español declarado Conjunto Histórico Artístico, en 1940. Será un auténtico placer pasear por sus estrechas, sinuosas y empedradas calles, contemplando las viviendas levantadas con muros de piedra o adobe con traviesas de madera que trazan dibujos geométricos. Muy próximo se encuentra Mogarraz, otro original pueblo que merece un paseo para contemplar su arquitectura civil de tramonera y piedra.
Con los pulmones cargados de aire puro, recomendamos continuar viaje hasta Ciudad Rodrigo, un bellísimo pueblo ubicado en la frontera con Portugal, declarado Conjunto Histórico Artístico en 1944. Durante siglos tuvo una gran importancia estratégica, por lo que cuenta con numerosos edificios defensivos que hoy en día son uno de los principales atractivos turísticos de esta ciudad. Destaca su castillo y su Torre del Homenaje, construido por Enrique II de Trastámara en el siglo XIV y que está situado en la parte más alta del núcleo urbano. En la actualidad el edificio alberga el Parador de Turismo de la ciudad.
Ruta de Gredos a las Hoces del Duratón
Otra ruta recomendada por AMV es la que pasa por las provincias de Ávila, Salamanca, Valladolid y Segovia con un recorrido de 350 kilómetros. El viaje comienza en El Barco de Ávila, localidad que cuenta con un atractivo patrimonio histórico-artístico, ubicada en el límite de las provincias de Salamanca, Cáceres y Ávila. Este pueblo conserva elementos urbanos y edificios significativos de gran interés, algunos de ellos gozan de la declaración de bien de interés cultural.
Continuamos viaje hacia Salamanca y con la moto aparcada en el hotel, la capital charra invita a recorrer su centro histórico y tomar el aperitivo en su animada Plaza Mayor. No olvidar visitar el Museo de Historia de la Automoción de Salamanca (MHAS), en cuya exposición permanente pueden admirarse coches clásicos y motos clásicas de diferentes épocas.
La ruta prosigue por las localidades vallisoletanas de Tordesillas, que anualmente acoge la concentración invernal Motauros, y Medina del Campo, villa de origen prerromano donde podemos visitar el castillo de La Mota (siglo XIV) y un casco antiguo declarado Conjunto Histórico artístico en 1978.
Finalizaremos el periplo en los municipios segovianos de Cuéllar, que alberga el bien conservado castillo de los duques de Alburquerque, una interesante fortaleza construida en la Edad Media, y la Iglesia de San Andrés, templo que data del siglo XIII, declarado Bien de Interés Cultural.
Continuaremos viaje hacia Sepúlveda, desde donde accederemos al Parque Natural de las Hoces del río Duratón, donde podremos contemplar el río encajado en un profundo cañón que, en algunos lugares, alcanza más de 100 metros de desnivel. Al interés y belleza del paisaje hay que añadir la gran riqueza arqueológica e histórica que encierra en su interior esta garganta.
Sea cual sea la ruta elegida, aprovecharemos el día antes de la partida para familiarizarnos con el itinerario que vayamos a realizar. En la web de la Dirección General de Tráfico (DGT) podremos consultar si existe alguna incidencia en la red viaria, mientras que la página de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) nos informará sobre la predicción del tiempo. Para los repostajes es muy interesante contar con una herramienta como un localizador de estaciones de servicio, en función de los kilómetros que vayamos a hacer y la autonomía de nuestra moto.