El presidente de la Diputación de Segovia, Francisco Vázquez, confía en que el palacio de congresos y exposiciones de La Faisanera pueda iniciar su actividad “a mediados de 2015 o, como mucho, en el último tercio de ese año”. La salida a licitación del proyecto del auditorio es inminente y las obras podrían iniciarse en torno al segundo trimestre de 2014 con un plazo de ejecución variable en función de la oferta que plantee la empresa que gane el concurso, aunque se prevé que oscile de 15 a 18 meses.

“No me preocupa que las obras se terminen dos meses antes o dos meses después de las próximas elecciones municipales (mayo de 2015), lo que me importa es que se hagan y bien”, subraya en declaraciones a la Agencia Ical. “El proceso de licitación llevará su tiempo porque yo creo que optarán muchas empresas y habrá que darles margen para que presenten el proyecto, plazos para la subsanación de defectos, hacer la selección… Si se puede acortar los plazos, mejor, pero probablemente se tarde”.

Vázquez avanza que “lo ideal” sería que en el mes de marzo pudieran comenzar ya los trabajos, aunque “luego habría otra fase posterior para el equipamiento”, de ahí que pensar en un hipotético inicio de actividad durante la primera mitad de 2015 se perfile a estas alturas prácticamente como un imposible. “Insisto en que igual otras personas tenían miedo al tema electoral, pero a mí no me importa”, sostiene.

En cualquier caso, el auditorio, con capacidad para 800 personas, es la única infraestructura pendiente para completar la reconversión del pabellón de caza, que se preveía inicialmente como casa club de golf, en un centro congresual a seis kilómetros de Segovia capital, en Palazuelos de Eresma. Ocupará el patio interior tras realizar un proyecto de cerramiento del complejo, que está ejecutado al 80 por ciento y cuenta con salas anexas para cursos, jornadas o seminarios. En total, una superficie construida de 4.000 metros cuadrados en una parcela de casi 10.000.

 

La gestión del Palacio, en manos privadas.

La financiación del proyecto está “asegurada” desde hace tiempo: el presupuesto global asciende a 20 millones de euros, unos ocho (el 40 por ciento) con cargo a una subvención que la Junta pagará mes a mes durante diez años; y los otros doce (60 por ciento), a través de la sociedad Segovia 21, participada mayoritariamente por la Diputación, que cuenta con el apoyo de la Federación Empresarial Segoviana (FES) y la Cámara de Comercio. Y una vez “resuelta” la parte económica, “en cuanto se pongan en marcha las obras habrá que estudiar en paralelo la forma de gestión”, avanza Vázquez, partidario de cederla. “Tal vez a un consorcio de derecho público, o una gestión privada… La Administración está para lo que sabe, y esto creo que deben llevarlo profesionales”, asegura el presidente de la Diputación cuestionando la capacidad de los funcionarios de Turismo.

Pero el proyecto tiene sus tiempos y el más inmediato pasa por la citada salida a licitación con el segundo semestre de 2015 en el horizonte para la apertura, siempre que no surjan imprevistos de relevancia: “Determinadas personas están siempre poniendo trabas”, critica el presidente de la institución provincial en clara alusión al alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, quien, aparte de liderar a mediados de este año una campaña que sumó 13.131 firmas contrarias a la construcción del palacio con dinero público, dictó un decreto de Alcaldía el pasado 30 de octubre para interponer un recurso judicial contra la licencia de obras concedida semanas antes por el Ayuntamiento de Palazuelos.

La vía judicial abierta por el Consistorio segoviano “no tiene efectos suspensivos”, matiza Vázquez, aunque queda margen, trámites y demasiados meses por delante como para poder garantizar que el proyecto se desarrolle sin nuevos conflictos ni más demora.

 

Captación de congresos “a dos años vista”

Entretanto, la Diputación asegura que ya está trabajando en paralelo para tratar de cerrar las primeras actividades, de ahí que técnicos del Patronato Provincial de Turismo viajaran a Sevilla para participar del 2 al 4 de diciembre en la MITM Euromed , una feria interactiva dirigida al mercado de incentivos, reuniones y eventos que se celebra cada año en una ciudad española desde 1997. “Es la reunión más importante del país en esta materia”, valora Vázquez.

“El tipo de congresos internacionales que queremos traer aquí, que mueven mucho dinero y muchas personas de Europa y el resto del mundo, no se deciden seis meses antes de la fecha de celebración, sino con uno y dos años de antelación. Por eso ya estamos intentando captar ese mercado internacional a dos años vista”, explica. De hecho, como ya precisó en su día la Diputación, los representantes del Patronato de Turismo mantuvieron una veintena de encuentros en Sevilla, de los cuales solo dos fueron con españoles y el resto, con promotores de Estados Unidos, Francia, Dinamarca, Alemania, Bulgaria, Hungría, Eslovaquia y Suecia.

“El pastel” del turismo de congresos es amplio, mueve más de 5.000 millones de euros al año en España y “no ha dejado de crecer ni durante la crisis”, recuerda el presidente de la Corporación provincial, que el pasado jueves mantenía una conversación telefónica con el director general de Ifema, Fermín Lucas, para seguir avanzando en la posibilidad de alcanzar convenios de colaboración y que Segovia, en cierto modo, sirva de ‘filial’ de la institución ferial madrileña. “Hay cuestiones que a lo mejor para el Ifema son residuales y que para una ciudad y una provincia como Segovia pueden resultar muy atractivas, igual que la opción del palacio de congresos de Segovia puede ser muy atractiva para clientes del Ifema a la hora de organizar determinadas actividades”.

Vázquez espera contar “pronto” con un informe actualizado del impacto económico que puede alcanzar el futuro centro congresual segoviano, aunque “un borrador” presentado meses atrás ya situaba en torno a los 20 millones la repercusión anual de otros de similar nivel y condiciones como los de Ávila o Toledo, infraestructuras que nada tienen que ver con el proyecto segoviano.

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