La Confederación de Hostelería y Turismo de Castilla y León recalcó hoy su “más profunda indignación”, al tiempo que su “malestar y tristeza” por lo que considera “un agravio comparativo” con relación a las ayudas que la Junta de Castilla y León ha decidido conceder convocando en régimen de concesión directa, subvenciones de apoyo a la promoción del sector comercial y a su tejido asociativo ante la crisis del COVID-19, “dejando de lado a las asociaciones empresariales del sector de hostelería”, informa Ical.
“Tener como finalidad la defensa de los intereses del sector del comercio al por menor, es el requisito que debe de cumplir aquella asociación, federación o confederación que solicite este tipo de ayuda, quedando claramente excluidas todas aquellas que estén encuadradas en el sector de la hostelería”, que a juicio de la Confederación “han estado desde el principio de la pandemia, a través de sus respectivos gabinetes jurídicos, ayudando al hostelero en el mantenimiento de su negocio, de sus trabajadores y tratando de mantener al máximo el consumo para que su negocio pudiera ser rentable”.
En un comunicado recogido por Ical, señalan que no comprenden que el sector hostelero se quede al margen de estas ayudas en un momento “de máxima necesidad para aglutinar el tejido productivo del sector”, y en unos tiempos en que los gastos de personal y mantenimiento de las diferentes asociaciones son los mismos de siempre, y en el que las bajas de empresarios están lastrando las posibilidades económicas de todas ellas.
“Las ayudas a este tipo de asociaciones son más que necesarias, para que todas ellas puedan seguir cumpliendo con sus objetivos, que no son otros que la ayuda y asesoramiento, al tiempo que organizar y coordinar acciones que fomenten el consumo. Sin este tipo de asociaciones las posibilidades de los empresarios de hostelería quedarían enormemente dañadas, y es por ello por lo que esta Confederación y sus asociaciones, consideran ser merecedoras de este tipo de ayudas”, remachan.