Una de las primeras medidas que adoptará el candidato del Partido Popular a la Alcaldía de Segovia, Jesús Postigo, si los segovianos el otorgan su confianza, será la de apagar las cámaras que controlan el acceso de vehículos a la Plaza Mayor. Y además, creará nuevos aparcamientos disuasorios en las entradas a la ciudad. Así lo ha comunicado en las inmediaciones a la Plaza Mayor.
Según comentan los populares «el candidato socialista, durante sus ocho años de mandato al frente del Ayuntamiento, ha practicado una política de prepotencia en materia de regulación del tráfico en el centro histórico de la ciudad, perjudicando a los vecinos residentes de la zona y a los visitantes a la ciudad».
Para la candidatura popular «además de las tan caprichosas como inútiles lucecitas embutidas en el suelo de la Plaza Mayor, el gobierno municipal socialista ha instalado un bolardo que ha causado numerosos accidentes en vehículos que pretendían circular por esta zona céntrica. Dicha política fracasada ha sido relevada por los socialistas con la instalación de unas cámaras de control de matrículas en las calles de Cronista Lecea y de Barrionuevo, para evitar que los vehículos transiten por la Plaza Mayor».
Los datos difundidos por el propio equipo de gobierno socialista desvelan que, de mantenerse dicha política, las multas por la mera infracción de dicha normativa pueden ser muy importantes. «Unos 1.800 vehículos transgredieron en dos días la norma municipal, lo que, a razón de 200 euros, supone 360.000 euros de recaudación cada dos días, así como múltiples perjuicios a quienes transiten por la ciudad».
Por último, los populares señalan que «dicha regulación ha despertado un amplio malestar entre los ciudadanos residentes en el recinto amurallado, según nos han comentado en las asociaciones vecinales de AVRAS y San Andrés. Es previsible que de este tratamiento a los transgresores de estar normas, no deje muy buen sabor de boca a los visitantes de la ciudad y a los residentes».