El PSOE de Zarzuela del Monte ha criticado que durante el último pleno, el alcalde del municipio, Mariano Mesonero, haya votado en contra de la moción que presentaban los socialistas para instar a la Junta que retirara la propuesta de unificación de las urgencias de atención primaria. «Ha vuelto a quedar claro que el alcalde considera nuestro pueblo y nuestro Ayuntamiento como su cortijo particular actuando con despotismo y faltas constantes de educación en sus intervenciones”, señala la portavoz socialista Marina Marcos.
A través de un comunicado, Marcos lamenta la actitud del alcalde al ser el único que votó en contra de dicha moción en la que se instaba a la Junta a retirar la propuesta de unificación de las urgencias de atención primaria en el Centro de Salud de San Lorenzo que pasará a atender a más de 78.000 personas. Según asegura el comunicado el edil señaló que “yo voto en contra porque me debo a mis siglas”, a pesar de que otros dos concejales del PP sí apoyaron la moción.
Para la portavoz del PSOE, el alcalde de la localidad antepone sus intereses políticos a la defensa de los intereses de los vecinos y actúa de una manera «despótica» como «varios miembros del equipo de gobierno». Además denuncia que en el último pleno el concejal de Urbanismo llegó a proferir insultos contra el padre de la concejal socialista demostrando “un estado de nerviosismo ante nuestras peticiones de explicaciones en los asuntos del orden del día a las que continuamente se nos contesta con evasivas, especialmente en aquellas relativas a las cuentas municipales en las que queda de manifiesto que el desconocimiento del alcalde y de su equipo en materia contable es absoluto”.
Los socialistas criticaron la «incapacidad» y «desconocimiento» del regidor municipal «escudándose siempre en la Secretaria municipal que es quien maneja verdaderamente muchos de los hilos del consistorio dada la incompetencia del alcalde”. Según Marcos, «la política errática» de Mesonero se traduce en continuos cambios en las tasas municipales, falta de rigor en los presupuestos municipales o «irregularidades urbanísticas en alguna propiedad de algún miembro del grupo municipal del PP a las que no se pone freno”. A esto, añade, «la falta de transparencia en las actas de los Plenos siempre incompletas y en las que no se recogen las intervenciones de los concejales”.