El historiador salmantino de la Universidad de Valladolid, Teófanes Egido, reivindicó hoy su disciplina de estudio como “maestra de la vida que no deja de enseñar” tras su elección como nuevo Premio Castilla y León de Ciencias Sociales y Humanidades, informa Ical.

En declaraciones a Ical, apenas minutos después de conocer la noticia, Teófanes Egido mostró “gratitud” por su elección, si bien también demostró una gran humildad al considerar que, en el campo de las Humanidades en Castilla y León, “hay personas que lo merecen más”.

En cualquier caso, Egido sí se mostró satisfecho con la posibilidad de que, con su elección, se premie “todo lo que se refiere a este pasado que hoy estamos viendo que no lo es tanto”, en relación a la pandemia del COVID-19, puesto que “hay realidades que se repiten y para las que uno no está preparado a pesar de los dogmas falsos”.

Por ello, se consideró satisfecho de que “se valore la historia de Castilla y León” y a sus estudiosos, aunque “a veces nos equivoquemos” como señaló el propio Egido con humildad al recordar que “muchos afirmamos que, después del siglo XVIII, las pestes habían desaparecido de este mundo occidental tan progresista y aquí están, para enseñarnos a darnos cuenta de que no somos los dueños y señores de los tiempos”.

No obstante, Egido volvió a defender su disciplina de estudio puesto que “el mirarla enseña” y se convierte así, por tanto, en “maestra de la vida”.