Este domingo 15 de septiembre se celebra la romería de Interés Turístico Regional en honor al Santísimo Cristo del Caloco con la que El Espinar cierra nueve intensos días de fiestas.
La jornada festiva comienza al amanecer en el Portalón. Allí, se concentran los romeros y las carrozas que se preparan para la ocasión, tras una noche festiva al calor de la lumbre en la Plaza de Toros, alrededor de la hoguera de la tradicional verbena del Teo.
Como la concentración comienza a una hora temprana, tras la fiesta de la noche anterior y ocho días festivos ininterrumpidos, se reparten sopas de ajo entre todos los asistentes para entonar el cuerpo.
Tras la misa cantada se lleva la imagen del Cristo del Caloco desde la Iglesia de San Eutropio en El Espinar, donde ha permanecido los ocho días anteriores durante las fiestas, de regreso a su ermita.
Buena parte de los devotos hacen ese recorrido, los kilómetros que separan el pueblo de la ermita del Cristo del Caloco, a pie.
Sin embargo, otros también se animan a subir a caballo a la romería.
UNA VEZ EN LA ERMITA
Una vez en la ermita, después de la tradicional celebración de la misa de campaña comienza la romería propiamente dicha, en la que no falta la dulzaina y el tamboril, los puestos de venta, el repique de campanas y la despedida de los espinariegos a su Cristo que no volverá a pisar la iglesia hasta el año siguiente.
Las fiestas del Cristo del Caloco son de las más turísticas de la provincia de Segovia.
Comienzan el segundo sábado de septiembre y la romería tiene lugar ocho días después, el domingo de fin de fiestas, que se despiden por la noche con la Traca.