Los secretarios generales de CCOO y UGT en Castilla y León, Vicente Andrés y Faustino Temprano, amenazaron hoy al Gobierno con salir a la calle si cede al “chantaje” de la patronal y no deroga la Reforma Laboral y sube el Salario Mínimo Interprofesional (SIM).
Bajo el lema ’Ahora sí toca’, ambas organizaciones continuaron hoy con la campaña de movilizaciones iniciada a principios de año para pedirle al Gobierno que cumpla con sus compromisos electorales y con su pacto de gobernabilidad con Unidas Podemos, y se concentraron en Valladolid, a las puertas de la sede de la Delegación del Gobierno, para continuar con sus reivindicaciones y denunciar que hay un intento de convertir la precariedad laboral en uno de los elementos de la competitividad empresarial.
Temprano indicó que una vez lograda la reforma del sistema público de pensiones a través del Diálogo Social, el Gobierno debe afrontar ya derogación la Reforma Salarial y constituir la mesa de negociación para la subida del SMI, ya que resulta imprescindible que suba un salario que, en el caso de Castilla y León afecta a más del 60 por ciento de los trabajadores.
En este sentido, el líder de UGT indicó que los salarios recogidos por los convenios colectivos de muchas categorías profesionales en la Comunidad están ya “sobrepasados” por el Salario Mínimo Interprofesional, “por lo que se necesita una actualización para que los trabajadores recuperen poder adquisitivo”.
En cuanto a la derogación de la Reforma Laboral, Temprano aseguró que el Gobierno no puede mirar hacia otro lado y indicó que, en el caso de no llegar a un acuerdo con la patronal, sí lo puede alcanzar con los sindicatos, o bien, puede legislar y modificar el Estatuto de los Trabajadores. A su vez, también explicó que la llegada de los fondos de reconstrucción de la UE exigen “reformas del mercado laboral.
Mientras tanto, Vicente Andrés recalcó que el Gobierno debe cumplir sus compromiso después de que los trabajadores hayan cumplido durante la crisis “estando al pie del cañón en todos los sectores esenciales”, los salarios se hayan congelado y los sindicatos hayan aparcado su reivindicaciones. En su opinión, en un momento de crecimiento, de expansión presupuestaria y de la llegada de los fondos de reconstrucción de la UE, es necesario atender también las demandas de la clase trabajadora y acabar con las “inaceptables” condiciones del mercado de trabajo, con una alta temporalidad y precariedad que están generando pobreza.
A su vez, también recordó que España se encuentra entre los países de la UE con los salarios más bajos y recalcó que si no se produce una restitución de los derechos perdidos por los trabajadores en un momento de crecimiento, “nos veremos en la calle durante muchos meses”. Para Andrés, si el país “pretende coger el tren europeo, necesita una mano de obra bien cualificada y bien remunerada”.
Tras la concentración, ambos dirigentes trasladaron al delegado del Gobierno, Javier Izquierdo, sus reivindicaciones.