Los grupos de la oposición exigen transparencia en el Ayuntamiento de Segovia, y para ello, presentan mociones y propuestas en el consistorio.
Así, en una moción, el PSOE insta al alcalde de Segovia, José Mazarías, a que «decrete la participación de los portavoces de todos los grupos con representación municipal, con voz y sin voto, en la Junta de Gobierno Local», reclama Clara Martín.
Para la formación naranja, «es lamentable que todos los grupos políticos de la oposición tengamos que exigir transparencia y herramientas a través de mociones”, indica la portavoz de Ciudadanos, Noemí Otero.
El Partido Socialista recuerda que en la historia democrática del Ayuntamiento de Segovia marca un hito la decisión adoptada por el Gobierno municipal del PSOE, que encabezó Pedro Arahuetes, en 2011, que supuso la entrada de los portavoces de la oposición, entonces del PP (Jesús Postigo) y de IU (Luis Peñalosa), con voz y sin voto, en la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Segovia. Los socialistas argumentan que el PSOE tomó la decisión para avanzar en calidad democrática y para dar respuesta a una petición formulada por los populares y que éstos celebraron, pues, de hecho, el mismo Postigo llegó a asegurar que «creemos que podemos aportar muchísimo a la gobernabilidad y a los intereses de Segovia».
Desde entonces, añaden desde el Grupo Municipal del PSOE, con los sucesivos Gobiernos socialistas encabezados por Clara Luquero y Clara Martín, todos los portavoces de los grupos con representación municipal han estado presentes en este órgano, también, por supuesto, los del PP: Raquel Fernández y Pablo Pérez, que asistían con voz y sin voto, pudiendo aclarar, in situ, cuántas dudas les suscitaran los asuntos tratados y sometidos a aprobación. En otras palabras, concluyen, con esta decisión los sucesivos Gobiernos socialistas dieron facilidades para poder ejercer una oposición informada, constructiva y en favor del interés general.
Por ello, Clara Martín considera que «la decisión adoptada por el actual alcalde José Mazarías, de excluir de la Junta de Gobierno Local a los portavoces de los grupos de la oposición, supone una clara incoherencia y contradicción, con las palabras que pronunció en el discurso de investidura, el pasado 17 de junio, donde, tal y como recogieron los medios de comunicación, anunció un mandato “en el que primará el diálogo con el resto de fuerzas políticas, con los vecinos y con el resto de instituciones”.
Además, añade, es una pérdida de calidad democrática y de transparencia en la gestión, además de un obstáculo a la labor de fiscalización que los ciudadanos han otorgado a los grupos de la oposición.
Para la edil de Ciudadanos, es lamentable ver que todas las propuestas de la oposición vayan en la misma línea de búsqueda de transparencia y participación efectiva de los concejales en la actividad municipal.
Por otro lado, Noemí Otero ha hecho hincapié en la futura auditoría que propone el equipo de gobierno, porque según su criterio “es puro postureo, por el importe y por el alcance de la misma. No será un contrato menor, no se analizará el funcionamiento del Ayuntamiento y no lo hará una empresa segoviana como también afirmó el señor Mazarías”, ha señalado, puesto que según han avanzado desde el equipo de gobierno, se hará un estudio contable de 2022 y solo referido a los organismos autónomos: EVISEGO, EMT y Fundación Don Juan de Borbón.
En otro orden de cosas, la edil naranja ha recalcado que el de Mazarías es “el gobierno más costoso de la historia municipal en Segovia». Y ha calificado de «tomadura de pelo para los segovianos las liberaciones al 95%, que pueden ser legales, pero éticamente reprobables también”.
Además, Ciudadanos y Segovia en Marcha instarán al equipo de gobierno a constituir «a la mayor brevedad posible» una comisión especial que aborde la reforma del reglamento orgánico con el objetivo de adecuarlo a la realidad social y política de la ciudad.
