Bajos índices de robos
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A finales del año pasado, el reporte ‘Los pequeños negocios y su seguridad’, elaborado por la empresa de seguridad, Securitas Direct, reveló que los negocios de tres ciudades de Castilla y León (Segovia, Ávila y Palencia) tuvieron bajos índices de robos, registrando el menor número de robos durante el 2023.

¿Cómo lo lograron?

El reporte afirma que, tomando en cuenta las cifras de delincuencia registradas durante el 2022, buena parte de los negocios redoblaron sus esfuerzos de seguridad a lo largo del año, incluyendo el uso de puertas y ventanas de blindadas, alarmas conectadas directamente a una central receptora, rejas en puertas y ventanas, entre otros.

Apenas el 11,7% optó por no incluir medidas de seguridad en su negocio, sin embargo, se desconoce qué porcentaje de estos fue víctima de robos durante el año.

Aunque no entran en detalle, el estudio dejó entrever que el 93,4% de los negocios ya cuenta con equipos de videovigilancia «con el objetivo de ver lo que ocurre en su negocio en todo momento».

Con el paso de los años, los sistemas de seguridad se han modernizado para no solo brindar una imagen más clara y un campo de visión más amplio, sino también para incorporar tecnología avanzada, como inteligencia artificial (IA), capaz de crear registros de información, estudiar los gestos de las personas, e incluso tomar decisiones en tiempo real según la actitud de las personas que transitan los alrededores.

¿Qué otras herramientas se utilizan?

Más allá de los datos compartidos por el reporte, distintos especialistas en seguridad recomiendan que se tomen precauciones adicionales para disminuir aún más las posibilidades de ser víctimas de robos.

La primera se basa en estudiar la logística de la tienda y rediseñarla (en caso de ser necesario) para que el personal tenga una mejor visión sobre los clientes y la mercancía.

La formación de los empleados es esencial al momento de prevenir robos, no solo porque les permitirá comprender mejor cuál es el modus operandi de los criminales (permitiendo frustrar los robos antes de que ocurran) sino que también los ayudará a responder de forma adecuada en caso de que se lleve a cabo un acto vandálico.

¿Quiénes siguen en riesgo?

Aunque la delincuencia contra los comercios se mantuvo por debajo de la media en las tres ciudades, la tendencia no se experimentó del mismo modo en todos los negocios. De acuerdo al estudio de finales del año pasado, tanto bares como restaurantes vivieron un 2023 repleto de robos e intrusiones.

Durante la temporada navideña, el Ayuntamiento también se vio forzado a incrementar las medidas de seguridad en distintas áreas de la ciudad para proteger los elementos decorativos y comerciales. Entre los delitos más comunes se encontró el robo de productos, la destrucción de adornos e incluso el daño a la infraestructura.

Del mismo modo, el sistema de trenes de toda Castilla y León se vio azotado por el vandalismo, con más de 260 actos registrados durante el 2023. El gasto habría alcanzado los 1,4 millones de euros según las autoridades pertinentes, casi el 5% del gasto total registrado por el vandalismo grafitero en el país.

¿Y cuáles son las más peligrosas?

En cuanto al espectro contrario, el país tendría todavía algunas de las ciudades más peligrosas de Europa. En concreto, 4 ciudades españolas se colaron al top 10 de las más inseguras, Barcelona, Melilla, Ceuta y Madrid.

Esto lo afirmó la Oficina Europea de Estadística de la Comisión Europea el mes pasado, sin embargo, se trata de datos correspondientes al 2021, por lo que es posible que la lista haya cambiado.

Aunque las cifras sean bajas en comparación con las de otras regiones del mundo, no debemos ignorar que España registró un incremento del 6% en la inseguridad durante el 2023.

La seguridad de los comercios es una tarea compleja que requiere de un estudio constante de las medidas de protección que empleamos. Por este motivo, casos como el de Segovia deben utilizarse de inspiración para incrementar las medidas de seguridad de los negocios de manera inteligente.