Una treintena de afectados por el cierre de las urgencias nocturnas en el Punto de Atención Continuada de Ayllón (Segovia) se manifestaron hoy ante la puerta de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en la capital segoviana para mostrar su “repulsa y rechazo” a la decisión tomada desde la Consejería de Sanidad el pasado mes de octubre. Miembros de la Plataforma Contra la Degradación Sanitaria en el Medio Rural de Ayllón esperaron que se tome ejemplo de la marcha atrás en el traslado de la ESO rural porque a su entender, la cuestión sanitaria “afecta a todos los ciudadanos” y no solo a alumnos de 1º y 2º de Secundaria.
Tras criticar las declaraciones del delegado territorial de la Junta en Segovia, Javier López-Escobar en los que aseguraba que los informes avalan la medida tomada, los vecinos insistieron en que las distancias recorridas y el refuerzo en el transporte sanitario es insuficiente puesto que en ningún caso baja de los 30 minutos. Asimismo, recordaron que el trayecto hasta el Hospital de Segovia es de 95 kilómetros, lo que supone más de una hora de viaje, y hasta Aranda, 50 kilómetros o 54 minutos.
Dejando de lado las pancartas que portaban, en las que pudo leerse ‘Urgencias sin recortes’ o ‘Con la sanidad no se juega’, tres representantes de la plataforma tuvieron la oportunidad de reunirse con el representante del Ejecutivo regional en sus despacho. Allí, según López-Escobar manifestó posteriormente a los medios de comunicación, el delegado territorial trasladó que no existe un incremento de las urgencias ni parámetros que induzcan a retirar la medida.
Según los datos ofrecidos por la administración y aunque, como explicó, sería necesario un mayor tiempo para evaluarlos, la media en el traslado de la ambulancia medicalizada rondaría los 15 minutos, mientras que la Unidad de Soporte Vital Básico tardaría los 35 minutos y el helicóptero, alrededor de 37. También señaló que se han reducido las personas que acuden a las urgencias nocturnas en la localidad de Riaza, ubicada a 25 kilómetros, por lo que “desde un punto de vista técnico” no detectaron que la medida tenga que ser cambiada.
Para López-Escobar, la medida no se efectuó en términos de ahorro y en este sentido recordó que cuando fue necesario se enviaron más profesionales en periodos especialmente complicados como Semana Santa o durante las últimas nevadas. “No hemos tomado una medida lesiva para la salud”, remarcó para insistir en que la medida continuará siendo evaluada porque es “flexible”.
No obstante, las representantes de la Plataforma Contra la Degradación Sanitaria en el Medio Rural de Ayllón, Sonia Castro y Elena Sanz, incidieron en que con el apoyo de los vecinos de la localidad, continuarán movilizándose para conseguir la retirada del decreto porque “las circunstancias de nuestra comarca avalan de forma contundente la reapertura del centro” con más de 5.000 habitantes y una superficie de más de 750 kilómetros cuadrados.