El beneficio neto de Caja Segovia subió el uno por ciento en el primer semestre del año, respecto al mismo periodo de 2009, y se elevó hasta los 20 millones de euros, según informa la entidad a través de un comunicado, que precisa que, a pesar de la situación de recesión de la economía mundial en los últimos meses, Caja Segovia “ha optado por la prudencia en el desarrollo de su actividad financiera, ha moderado su nivel de apalancamiento y procurado mejorar el equilibrio entre sus masas patrimoniales, lo que ha supuesto una evolución favorable en sus posiciones de liquidez y de solvencia durante el último año y medio”.
Los recursos gestionados de clientes alcanzaron, al final del primer semestre, los 5.569 millones de euros, con un crecimiento interanual del 0,3 por ciento. Los recursos ajenos registraron un saldo de 5.290 millones de euros, que se mantiene en un nivel similar al año anterior. Los fondos de inversión cerraron en junio con un saldo de 182 millones de euros y los planes de pensiones finalizaron el semestre con un saldo de 97 millones de euros; el crecimiento interanual conjunto de fondos de inversión y planes de pensiones supone el 9,7 por ciento.
La inversión crediticia bruta descendió un 2,3 por ciento hasta situarse en los 4.395 millones de euros, mientras que elcrédito a la clientela, neto de la provisión de insolvencias y de otros ajustes por valoración, terminó el primer semestre del año en 4.182 millones de euros, lo que supone una tasa de descenso interanual del 3,7 por ciento.
La ratio de morosidad del crédito alcanzó el 4,45 por ciento, descendiendo en casi medio punto en lo que va de ejercicio; mientras que la cobertura de insolvencias crediticias se situó en el 111,9 por ciento, mejorando en casi veinticinco puntos en el semestre. Ambas ratios de Caja Segovia son mejores que las medias del sector de cajas de ahorros, situadas en el 5,10 y 57,2 por ciento, respectivamente, según el comunicado.
La entidad ha realizado durante el primer semestre, de forma precautoria, un importante esfuerzo de dotaciones y saneamientos superior a los 30 millones de euros, con lo que los fondos totales constituidos para provisión de insolvencias se situaron próximos a los 225 millones de euros, que se añaden a los más de 93 millones de euros dedicados a fondos para otras coberturas
El coeficiente de solvencia estimado por la entidad a 30 de junio de 2010 era del 11,70 por ciento, casi cuatro puntos por encima del nivel exigido por la actual normativa vigente, lo que supone un exceso de recursos propios de unos 160 millones de euros con relación al capital regulatorio mínimo establecido por el Banco de España.