Javier López-Escobar, delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Segovia, recibió ayer por la mañana en su despacho de la Delegación a la alcaldesa de Vallelado, Rebeca Cobos Fraile, con el fin de abordar la previsión para el próximo curso 2012/2013 para los dos niveles de Enseñanza Secundaria Obligatoria que se imparten en el colegio de esta localidad.
En este sentido, López-Escobar reiteró la información publicada con respecto a la ‘ESO rural’, asegurando “que las decisiones adoptadas responden a lo dispuesto en la Ley Orgánica de Educación (LOE) en cuanto a la implantación de la Educación Secundaria Obligatoria”. Por ello, prosigue el delegado, “cuando la Conserjería de Educación resuelve el traslado de estas enseñanzas a los IES tiene en cuenta, entre otras razones, que los centros deben ofrecer la totalidad de las materias, así como aspectos relacionados con la socialización e integración con alumnos de la misma edad que refuerza las relaciones sociales, la búsqueda de la homogeneidad en la actuación docente con los diversos grupos de alumnos desde el punto de vista curricular y metodológico, la mayor y mejor disposición de recursos materiales en los IES, la mayor especialización del profesorado, la posibilidad de mejorar la oferta de optativas de las materias a los alumnos, la atención diversificada para alumnos que lo demanden, y el incremento de horas lectivas a 30 semanales frente a las 25 que reciben en la actualidad en los centros de primaria”.
Los cambios en la estructura del sistema educativo derivados de la implantación de la LOGSE (1990) contemplaban el traslado de los alumnos a los nuevos modelos de centro educativo. Por tanto los Institutos de Enseñanza Secundaria (IES) y, con posterioridad, otros modelos organizativos como los Centros de Enseñanza Obligatoria (CEO) o los Institutos de Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO) se han convertido en centros receptores de estos alumnos. Este modelo que tendría que haberse consolidado, de acuerdo con el calendario de implantación de la LOGSE en el curso 1996/97, sufrió algunos retrasos, consolidándose la adscripción de los alumnos, en el nuevo nivel educativo de 1º de la ESO, a partir del año 2000. En aquel momento, los Colegios de Educación Infantil y Primaria (CEIP) y los Colegios Rurales Agrupados (CRA) que mantenían las enseñanzas de 1º y 2º de ESO atendían un número significativo de alumnos y la respuesta de la administración educativa a la demanda de las familias mantuvo esta situación de una forma transitoria que ahora es preciso regularizar.