El consejero de Fomento de la Junta de Castilla y León, Antonio Silván, ha anunciado que la Ley de Vivienda permitirá cumplir las directrices europeas que obligan a que los edificios públicos tengan un consumo energético casi nulo en el año 2018, y todas las demás en 2020.
Así lo dijo en Segovia durante la inauguración de la III Conferencia Passivhaus en la que profesionales de varios países exponen ejemplos y técnicas de proyectos reales de edificios de consumo energético casi nulo, y que están comenzando a implantarse, con dos ejemplos en España, en Navarra y Granada.
En opinión de Silván, todo el sector de la construcción y todos los eslabones incluidos en el proceso “deben contemplar sostenibilidad y eficiencia energética; ese es el objetivo en el que estamos implicadas todas las administraciones”. Por ello confió en que la nueva Ley de Vivienda ayude a cumplir los plazos marcados por la Unión Europea. La nueva normativa es la primera Ley de Derecho a la Vivienda de Castilla y León que resume en un único texto normativo toda la legislación y regulación en materia de vivienda de la Comunidad.
Silván recordó que la UE “nos ha puesto los deberes”. “Por eso tenemos que seguir impulsando y desarrollando todas las actuaciones y medidas que consigan reducir el consumo y aumentar la protección al medio ambiente”, añadió.
En esa línea insistió en que la Ley de Vivienda incide en la sostenibilidad, en la eficiencia energética, en el uso de energías renovables, en la rehabilitación y en las certificaciones ambientales. “En definitiva todos compartimos el objetivo de sostenibilidad y eficiencia en nuestras edificaciones”, añadió.
Tras agradecer a los organizadores del encuentro el haber elegido Castilla y León para esta conferencia, apuntó que los plazos establecidos por Europa “han de cumplirse” y para ello “la Junta está poniendo los medios para que el objetivo se consiga”.
Por su parte, el presidente de la Plataforma, Javier Crespo, explicó que en España se impondrá la estandarización de las viviendas eficientes, que ya supone en otros países una demanda que supera la capacidad de construcción, como ocurre en Alemania. Además justificó la rápida amortización de estas construcciones debido a la reducción del consumo energético, que cifró en un 40 por ciento de media.
En la inauguración participó también el teniente de alcalde y concejal de Urbanismo de Segovia, José Llorente, quien recordó la puesta en marcha de indicativas legislativas tendentes a mejorar la eficiencia energética de los inmuebles, tanto nuevos como antiguos. Y puso de manifiesto proyectos como el de rehabilitación de áreas históricas, o de barrios completos como el de San José Obrero, donde se invertirán hasta 18 millones de euros en los próximos años.