«Este poema forma parte de los que escribí para un campamento de niños con problemas de alergia, pero se merece un apartado específico, por lo frecuentes que son las picaduras de abejas y avispas en la época de verano y las consecuencias desagradables que pueden tener.»
HIMENÓPTEROS
Si una avispa o una abeja
te clavan el aguijón,
¿sabrás darme la respuesta
de cual fue que lo clavó?…
La que el aguijón te deja
y que después se murió,
debes saber que es la abeja…
¡y la avispa se voló!.
Pero si tienes alergia
a cualquiera de las dos,
es conveniente que tengas
de adrenalina inyector.
José García Velázquez
Segovia, 18 de junio de 2010