Más de 5.000 personas participaron la noche del viernes en el concierto de Fito y Fitipaldis que se desarrolló en la ciudad deportiva de La Albuera en un ambiente de temor a que se suspendiera la actuación por culpa de la lluvia.
De hecho, la incertidumbre reinó hasta la misma hora del comienzo del concierto, que obligó a posponer actuación de los teloneros, La Cabra Mecánica. Posteriormente comenzó el artista bilbaíno, protagonista del primer gran concierto del año en la ciudad del Acueducto, que contó con la colaboración del Ayuntamiento de Segovia. Con un precio de 23 euros la entrada, los organizadores se mostraron satisfechos de la respuesta del público para contemplar al rockero vasco.
No es la primera vez que la mala climatología empaña la actuación de Fito y Fitipaldis en Segovia, pues en agosto de 2007, en las fiestas de La Granja de San Ildefonso, la lluvia retrasó la actuación.
En todo caso la presencia de Adolfo Cabrales en la provincia no es nueva. Ya tuvo ocasiones para demostrar su arte con la voz y la guitarra. Como miembro de Platero y Tú ya intervino en varias ocasiones en los conciertos del ciclo ‘Rock en la plaza del pueblo’, que se desarrolló en la localidad segoviana de El Guijar de Valdevacas.
En el concierto de ayer un videoclip animado sirvió de introducción para, con el permiso del cielo, continuar una hora y media de música; y donde logró que el público cantara al unísono los temas de sus dos álbumes con más éxito ‘Antes de que cuente diez’ y ‘Por la boca vive el pez’.