La Plaza de Medina del Campo ha acogido el último concierto de la la 39 edición de Folk Segovia que, desde el 28 de junio, ha llenado un año más las calles de ciudad de música y baile tradicional, con conciertos, talleres y pasacalles en los escenarios ya habituales, con la Alhóndiga como sede principal. El grupo granadino, que ha ofrecido un repertorio morisco andalusí, cristiano y sefardí con base en el flamenco, ha puesto el broche de oro a una edición muy especial donde, la noche de San Pedro, el Nuevo Mester de Juglaría ha vuelto a hacer vibrar a toda la ciudad.
Sin embargo, el festival ha ofrecido mucho más. Durante todo el festival, la Alhóndiga ha albergado la tradicional feria de discos de La Malinche, así como una exposición que rememorará el 40 aniversario de la Escuela municipal de dulzaina.
