La cacereña Isla Correyero, cuyo nombre completo esEsperanza Correyero Rodríguez, es la ganadora de la XXXI edición del Premio de Poesía ‘Jaime Gil de Biedma’ con su poemario ‘Japonesas’.
Este premio lo convoca la Diputación de Segovia, con una aportación al ganador en metálico de 10.000 euros. Correyero, dijo el coordinador del jurado, Gonzalo Santonja, es escritora consolidada, mientras que el sevillano Diego Vaya, con ‘Pulso Solar’, es el ganador del accésit.
Santoja recordó de Correyero su trayectoria desde mediados de los 80, con su antología ‘Buenaventura’, que es una pieza fundamental de la Transición, además de guionista de cine y televisión. Además de ser enfermera, lo que reflejó en un libro muy destacado como fue ‘Diario de una enfermera’, que tuvo “una capacidad de deslumbramiento” que ahora vuelve a repetir en ‘Japonesas’.
Esta obra, que se ha conquistado al jurado, es “sobre amor lésbico, aunque me quedo con el calificativo inicial de amor”, remarcó Santoja, que tiene “tres perfiles perfectamente integrados”, con la plenitud, después un amor roto, “de desesperación y de muy hondísima tristeza” y ya, al final del libro, “sí hay una ventana abierta a la esperanza y la recuperación, pero mínimo”.
Gonzalo Santoja expresó la consolidación de Correyero, con “un libro mayor”, dijo citando a un integrante del jurado, que es “audaz y de equilibrio, trabajado y homogéneo”. Para concluir, que ‘Japonesas’, que tiene “una primera lectura es apasionante la segunda acentúa ese deslumbramiento inicial”.
La audacia de este poemario incluye, argumentó el coordinador del jurado, “el equilibrio y aúna toda la poesía clásica de los endecasílabos con la audacia del irracionalismo”, además de ser “atrevido, instalado en la metáfora” y “a veces desconcertante”.
Gonzalo Santoja resaltó que el Premio ‘Jaime Gil de Biedma’ vuelve a tener “la excelencia” con Isla Correyero, así como “ayudar a nacer y consolidarse a poetas nuevos como Diego Raya, que necesita el respaldo de un premio como éste para seguir creciendo”.
El poemario 422 de la relación general, bajo el título ‘Pulso Solar’, de Diego Vaya (Sevilla, 1980), se lleva el accésit, dotado con 3.000 euros. Santoja recordó que el escritor andaluz ya cuenta con el premio ‘Gil de Biedma’, pero el que convoca el Ayuntamiento de Nava de la Asunción, que ganó con “un poemario extraordinario”.
Ahora con vuelve a tener otro importante reconocimiento, demostrando que tiene un gran futuro. “Su libro empieza aparentemente sobre el western, que sería el pretexto y Juan Rulfo sería el fondo”, resumió Santonja. En ‘Pulso Solar’, Diego Vaya denota “una sensibilidad muy intensa” que se hace visible en poemas como él que dedica al momento en que su hijo aprendió a escribir su nombre.
Reflexiones esperanzadoras
El presidente de la Diputación de Segovia recordó que son más de 1.500 los poemarios recibidos en esta trigésima primera edición, con autores que han afrontado “con su pluma, bolígrafo u ordenador”, la pandemia de forma reflexiva y esperanzadora. Para de Vicente, han demostrado con sus obras que “huir del lamento circunstancial es posible”, porque “elegir el instante, el sentimiento y la profundidad, la reflexión y la luz, ante el sollozo, la aflicción y la oscuridad no sólo es admisible, sino que, además, es preciso; en muchos casos necesario y dignificante”.
La institución provincial, según su presidente, se reivindica un año más como “la casa de toda la poesía” y de asegurar que, a pesar de que realidades y situaciones como las vividas durante el último año y medio han “obligado a prescindir de programas y proyectos importantes”, la Diputación en ningún momento se planteó tomar medidas con el ‘Gil de Biedma’.
La lectura del fallo del jurado de esta XXXI edición tuvo lugar en el salón de Plenos de la Diputación de Segovia y concluyó con un sonoro “¡Viva la poesía!”, entonado por el propio Santonja, que daba paso a un reconocimiento por parte de Miguel Ángel de Vicente al editor Chus Visor, en cuyas manos quedan ahora los dos poemarios, que serán publicados por la prestigiosa editorial y dados a conocer en el acto de entrega del Premio, que recuperará su lugar habitual en el calendario de otoño.