La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) ha advertido de la “ruina” a la que se enfrentan los ganaderos como consecuencia del “cerrojazo” de la hostelería debido a la incidencia el coronavirus. Bares y restaurantes han echado el cierre, lo que ha supuesto la cancelación “de la noche a la mañana” de los pedidos a los ganaderos especializados en productos destinados a la restauración, con quienes existe “una relación muy estrecha”.

El “cambio radical” que está asumiendo la sociedad en sus usos debido a esta pandemia, está generando “enormes pérdidas” a muchos ganaderos, algunos de los cuales no saben qué hacer con sus animales. “Los daños ya se están dejando sentir, sobre todo en los sectores del ovino-caprino y del porcino”, denunció UPA a través de un comunicado.

La restauración es el principal destino de lechazos y de cochinillos, productos que los españoles están hoy poco acostumbrados a cocinar en casa, “a pesar de que en realidad es muy sencillo hacerlo”, señalaron desde la organización de agricultores y ganaderos, que animó a los consumidores a adquirir estos productos y prepararlos en sus domicilios, en el marco de una dieta saludable y equilibrada, “más necesaria que nunca” en estos días de cuarentena.

Otros sectores ganaderos, como el de los huevos camperos o como el lácteo, tanto de vacuno como de ovino y caprino, mostraron también su “profunda preocupación” porque, con la ausencia de turismo, muchas pequeñas queserías están viendo hundirse sus pedidos. “Nos tememos que esto provoque problemas con la recogida de la leche a los ganaderos”, trasladó UPA.

UPA lanzó nuevamente un llamamiento a los consumidores, para que piensen que con sus decisiones de compra contribuyen al mantenimiento de sectores enteros, de puestos de trabajo y de zonas rurales que, si se quedan sin consumo, pueden irse a la ruina. “Es el momento para apostar por el origen España, que es el que garantiza la mayor calidad y la mayor seguridad”, señalaron.