Una subida de tensión de la línea eléctrica fue el detonante del incendio que motivó el desalojo de las diez monjas clarisas del Convento del Corpus Christi el pasado sábado.
La comunidad de Clarisas ha querido agradecer, mediante un comunicado remitido por el Obispado, » a todos los que ayudaron en esa tensa situación: a la policía local y nacional, a los bomberos y a los servicios sanitarios. Pero igualmente, al personal de la cafetería existente junto al convento que no dudaron en prestar toda su ayuda y a las personas que se acercaron a auxiliar»
El agradecimiento, sigue el comunicado, «se hace extensivo a las otras dos comunidades clarisas existentes en la capital segoviana, el convento de San Antonio el Real y el de Santa Isabel que abrieron sus puertas para acoger a las religiosas del Corpus. Así mismo, a la presidenta y secretaria de la federación de monasterios de clarisas por su apoyo prestado, al vicario de religiosas, que en nombre del Obispo y de la Diócesis de Segovia, se personó en el lugar de los hechos, y a todos los segovianos que les han expresado su cercanía y afecto»
Actualmente, cuatro hermanas han regresado ya al convento del Corpus para ver la situación, arreglar los desperfectos provocados por esa subida de tensión y preparar todo para retomar su ritmo de vida conventual y de clausura. Su intención es, en la mayor brevedad de tiempo, que el resto de hermanas, más delicadas de salud y todavía en los otros conventos de clarisas, puedan nuevamente incorporarse en estos próximos días a la comunidad.
Foto: Acceso al Convento del Corpus Christi Gary R. Caldwell /Flickr