El Festival Internacional de Teatro de Títeres de Segovia Titirimundi celebrará su 35 edición desde el 2 hasta el 5 de septiembre, considerando el contexto sanitario y social del momento. «La buena noticia es que se mantiene y seguiremos adelante: Cumpliremos 35 años impulsando el teatro de títeres en España desde la idea de su creador, Julio Michel, con un festival único en el mundo que ha convertido a Segovia en la meca del arte del teatro de títeres y ha potenciado el ámbito de la marioneta en la comunidad de Castilla y León». Así lo confirma su directora, Marián Palma, a pesar de la reducción presupuestaria con la que la Junta de Castilla y León ha dejado a Titirimundi en un «bache importante para su andadura». Un hecho que ha motivado un replanteamiento de su programación, con menor número de compañías ya establecidas y con una duración del festival más breve: cuatro días. 

Cuatro días que no dejarán de ser intensos dado el carácter del festival y su envergadura y su sello no solo de calidad, «sino de creación de un espíritu que durante estos 35 años se ha ido construyendo desde el sueño de una utopía, una utopía que se ha llevado a la realidad con trabajo y el ideal de un visionario», apunta Palma.

Titirimundi 2021 contará con más de una veintena de compañías que representarán sus espectáculos en patios, salas, jardines, y si las circunstancias lo permitieran, en las calles de la ciudad y bajo un cielo donde los vencejos volarán sobre acueducto dándole la bienvenida a todo el que esté dispuesto a dejarse asombrar, tal y como ilustra el cartel de esta edición, diseñado por Cristina Padilla Fernández-Vega a través del concurso convocado por el Festival y el Palacio de Quintanar, con el patrocinio de XP-Pen y la revista de diseño Experimenta. «Después de los tiempos difíciles que a todos nos ha tocado pasar, he querido representar el festival como esa vuelta, no a la vida normal sino a la magia, la inocencia y la esperanza. Los teatrillos que se van abriendo, un cielo despejado y luminoso, Titirimundi siempre es creer de nuevo en todo lo bueno«, expresa la autora, residente en La Lastrilla, y ganadora de la primera edición del mismo concurso en 2018. Padilla participó en el proyecto de reconversión de la Plaza Fernán González con el equipo de Boamistura y a sus 24 años cuenta con experiencia en diseño y desarrollo de marca para sendas empresas, así como diseño publicitario para Didáctica Gauss, además de parecer augurarle un futuro prometedor.

Referente mundial en el arte del teatro de títeres, y abriendo una ventana a la riqueza de la ilusión que propicia la creación artística, Titirimundi 2021 seguirá su máxima: impulsar y difundir el teatro de títeres de calidad que conserve la tradición y acoja las vanguardias y la fusión con otras disciplinas. Todo ello en la experiencia de vivir las artes escénicas con esa característica propia del Festival que ahonda en la necesidad de celebrar la Vida en sí misma a través del arte. «La buena noticia es que se mantiene y seguiremos adelante: Cumpliremos 35 años impulsando el teatro de títeres en España desde la idea de su creador, Julio Michel, con un festival único en el mundo que ha convertido a Segovia en la meca del arte del teatro de títeres y ha potenciado el ámbito de la marioneta en la comunidad de Castilla y León». Así lo confirma su directora, Marián Palma, a pesar de la reducción presupuestaria con la que la Junta de Castilla y León ha dejado a Titirimundi en un «bache importante para su andadura». Un hecho que ha motivado un replanteamiento de su programación, con menor número de compañías ya establecidas y con una duración del festival más breve: cuatro días. 

Cuatro días que no dejarán de ser intensos dado el carácter del festival y su envergadura y su sello no solo de calidad, «sino de creación de un espíritu que durante estos 35 años se ha ido construyendo desde el sueño de una utopía, una utopía que se ha llevado a la realidad con trabajo y el ideal de un visionario», apunta Palma.

Titirimundi 2021 contará con más de una veintena de compañías que representarán sus espectáculos en patios, salas, jardines, y si las circunstancias lo permitieran, en las calles de la ciudad y bajo un cielo donde los vencejos volarán sobre acueducto dándole la bienvenida a todo el que esté dispuesto a dejarse asombrar, tal y como ilustra el cartel de esta edición, diseñado por Cristina Padilla Fernández-Vega a través del concurso convocado por el Festival y el Palacio de Quintanar, con el patrocinio de XP-Pen y la revista de diseño Experimenta. «Después de los tiempos difíciles que a todos nos ha tocado pasar, he querido representar el festival como esa vuelta, no a la vida normal sino a la magia, la inocencia y la esperanza. Los teatrillos que se van abriendo, un cielo despejado y luminoso, Titirimundi siempre es creer de nuevo en todo lo bueno«, expresa la autora, residente en La Lastrilla, y ganadora de la primera edición del mismo concurso en 2018. Padilla participó en el proyecto de reconversión de la Plaza Fernán González con el equipo de Boamistura y a sus 24 años cuenta con experiencia en diseño y desarrollo de marca para sendas empresas, así como diseño publicitario para Didáctica Gauss, además de parecer augurarle un futuro prometedor.

Referente mundial en el arte del teatro de títeres, y abriendo una ventana a la riqueza de la ilusión que propicia la creación artística, Titirimundi 2021 seguirá su máxima: impulsar y difundir el teatro de títeres de calidad que conserve la tradición y acoja las vanguardias y la fusión con otras disciplinas. Todo ello en la experiencia de vivir las artes escénicas con esa característica propia del Festival que ahonda en la necesidad de celebrar la Vida en sí misma a través del arte.