La alcaldesa de Segovia, Clara Luquero, fue la encargada de reponer ayer la placa en recuerdo a los 31 segovianos, seis vecinos de la capital y 22 de la provincia, que fueron víctimas del nazismo y sufrieron el horror de los campos de concentración. Un placa que fue arrancada en un acto vandálico del monolito situado en el jardín de Los Huertos, el pasado diciembre, pintando sobre él una esvástica. La reposición expresa el reconocimiento de la ciudad a los luchadores “por la democracia, la libertad y contra el fascismo”.
Segovia inauguró este monolito en enero de 2019, con motivo del Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las víctimas del Holocausto, fecha que coincide con el aniversario de la liberación del campo de concentración de Auschwitz en 1945 por el ejército soviético. Un homenaje que fue aprobado por la corporación municipal, tras una moción presentada por IU.
En ese acto se recordó que la gran mayoría de los españoles deportados eran exiliados que habían abandonado España en 1939 y que contribuyeron a la defensa de Francia contra la Alemania nazi. De ellos, 31 eran segovianos y pasaron por los campos de Buchenwald, Mauthausen, Neuengamme o Dachau. En la placa, colocada de nuevo en la parte central del monolito de piedra, se puede leer: “A los segovianos deportados a los campos de concentración por defender la libertad frente al franquismo y al nazismo”
Tras la reposición de la placa, las autoridades se dirigieron a la Alhóndiga, donde por séptimo año consecutivo, Segovia celebró un acto de conmemoración en el Día Oficial de la Memoria del Holocausto y la Prevención de los Crímenes contra la Humanidad, con la participación del jefe acías, jefe de prensa de la Embajada de Israel en España, Uriel Macías; el director general del Centro Serfarad-Israel, Miguel de Lucas y Ángela Sanz-Briz, hija de Ángel Sanz Briz, Justo entre las Naciones.
Estos representantes institucionales junto a alumnos de centros educativos segovianos, colectivos y asociaciones sociales de la ciudad encendieron un total de seis velas. El acto contó con las piezas musicales, además de la poesía.
Por último, los alumnos del Colegio Cooperativa realizaron un pequeño montaje dividido en tres actos y entregaron una placa conmemorativa y diversos trabajos artísticos realizados por ellos en homenaje a las víctimas del Holocausto, mientras que los estudiates de 6º de Primaria del CEIP ‘Fray Juan de la Cruz’ interpretaron ‘El arte o la vida’. El acto concluyó con un minuto de silencio en memoria de las víctimas del Holocausto.