Castilla y León registró en 2012 un descenso del 19,6 por ciento en el número víctimas mortales en carretera, el sexto mayor de España en términos porcentuales, con un total de 127 fallecidos, 31 menos que en el año anterior, frente a una caída media nacional del 12 por ciento, con 1.304 muertos, 175 menos que en 2011. Las víctimas registradas en Castilla y León supusieron un 9,81 por ciento del global estatal, según datos publicados por la Dirección General de Tráfico.
La siniestralidad mortal bajó en todas las comunidades con respecto al año anterior, salvo en Asturias, País Vasco, Navarra y Baleares. En Castilla y León se ha producido en 2012 un total de 111 accidentes de tráfico, un 21,83 por ciento menos que en 2011 (142 accidentes). Además de las 127 personas fallecidas, se contabilizaron 64 heridos graves, un 14,67 por ciento menos que el año anterior (74), y 54 leves, un 15,63 por ciento menos (64).
Desde el año 2000, las víctimas mortales se redujeron en esta Comunidad un 75,2 por ciento, 330 fallecidos menos. Así, en 2000 se registraron en la autonomía 457 víctimas mortales en carretera; en 2005, 327; en 2009, 197; y en 2010, 212.
Por provincias, los fallecidos en carretera descendieron en seis de ellas y aumentaron en tres. Así, presentaron un mayor número de muertos León, que pasó de 18 a 20 (11,1 por ciento más); Salamanca, de 15 a 18 (20 por ciento); y Valladolid, que pasó de 12 a 22 (83,3 por ciento de incremento).
Por el contrario, el mayor descenso lo experimentó Palencia, con un 47,8 por ciento, al pasar de 23 a 12; seguida de Soria, con un 53,8 por ciento menos, desde 13 a 6; Burgos, con un 45,4 por ciento menos, de 33 a 18; Zamora, con un 46,6 por ciento de disminución, de 15 a 8; Ávila, con un 23,5 por ciento menos, de 17 a 13; y, por último, Segovia, con un 16,6 por ciento de reducción de víctimas mortales en accidente, al pasar de 12 a 10.