Cerrar en otoño, a más tardar, y como pronto en primavera la reconstrucción de la Atención Continuada en Castilla y León. Estas son las fechas que baraja la Consejería de Sanidad para desarrollar un proyecto muy macro que implicará reforzar este nivel asistencial y que comienza a rodar con el pilotaje de un nuevo recurso asistencial en la Comunidad: las unidades de soporte vital avanzado de enfermería, conocidos como ambulancias tipo C o SVAE, que dejan en manos de estos profesionales la atención de urgencias y emergencias.

Se trata de un recurso asistencial que lleva funcionado años en países de Europa, como Holanda y Suecia, y que en España estrenó Cataluña hace 30. Le siguieron Andalucía, Canarias, País Vasco, Castilla-La Mancha, Madrid y la Comunidad Valenciana, y ahora se implementa en Castilla y León con dos objetivos claros: reforzar la accesibilidad y la calidad de la asistencia urgente y de emergencias y, dos, impulsar el desarrollo de las competencias de Enfermería.

El objetivo de la Consejería es diseminar por todo el territorio autonómico 40 soportes vitales avanzados de enfermero, según figura en el borrador del plan de implementación de nuevos recursos para la reconstrucción de la Atención Continuada en Castilla y León conocido por Ical, y que recoge la incorporación de 84 nuevas ambulancias, tanto medicalizadas como de soporte vital básico, y un helicóptero de emergencias medicalizadas a mayores, para completar su flota hasta llegar a los 228 recursos.

Con la previsión de extender el modelo de las unidades de soporte vital avanzado de enfermería en el territorio más pronto que tarde, la Gerencia de Emergencias Sanitarias ha comenzado esta misma semana a pilotarlo ya en el Área de Salud de Valladolid Oeste, en concreto en la localidad de Villafrechós, para proporcionar asistencia a la población de esta zona básica de salud de manera preferente, aunque no exclusiva, ya que podría utilizarse en otra área si fuera necesario.

En concreto, esta área la integran Aguilar de Campos, Barcial de la Loma, Bolaños de Campos, Cabreros del Monte, Morales de Campos, Palazuelo de Vedija, Pozuelo de la Orden, Santa Eufemia del Arroyo, Tordehumos, Villagarcía de Campos, Villamuriel de Campos y Villanueva de los Caballeros.

El coordinador de este soporte vital avanzado de enfermería, José María Cepeda, defiende las virtudes del servicio, “fundamental en una Comunidad con una gran dispersión geográfica, con el que se trata de mejorar la respuesta a la demanda de asistencia sanitaria urgente, con un recurso más y avanzado que puede solucionar muchas urgencias y emergencias, y apoyar otras unidades”. “Se trata de sumar nuevos recursos que complementen a los que hay y que aumenten la accesibilidad al servicio de emergencias. Que cualquier ciudadano de Castilla y León tenga cerca un recurso avanzado que le pueda atender y darle una asistencia inicial ante una urgencia o emergencia”.

Competencias avanzadas

Estas ambulancias están dotadas de un profesional de Enfermería y dos técnicos de emergencias sanitarias con cualificación y experiencia en la atención a urgencias y emergencias en el ámbito prehospitalario, con una ambulancia dotada con el soporte tecnológico necesario para prestar soporte vital avanzado.

“Desde hace años, los enfermeros estamos especializándonos y desarrollando competencias avanzadas. Prestamos cuidados avanzados tanto en urgencias como en emergencias y podemos atender muchas situaciones de complejidad baja o media”, explica, para precisar que dentro del perfil de competencias avanzadas de Enfermería está la asistencial inicial a una emergencia. “No se trata de restar sino de sumar recursos avanzados para atender todas aquellas situaciones que puede atender un enfermero”, precisa, para indicar que ante una asistencia más compleja entrarían las Unidades Medicalizadas de Emergencias (UME), en las que va un médico.

Para reforzar la calidad y seguridad de las SVAE, los enfermeros responsables cuentan con el apoyo de un médico consultor, al que recurren en el caso de tener que tomar “una decisión más compleja, que se salga de los protocolos, o, por ejemplo, en el de tener que poner una medicación muy específica”. “Siempre tenemos ese apoyo si es necesario, con acceso las 24 horas del día”.

Cepeda destaca que el pilotaje arranque en momentos COVID-19, ya que la “implementación del modelo e impulsar un nuevo recurso es bastante complejo”. “Tiene su valor ahora cuando parece que tenemos que tener acceso a más recursos. El sistema sanitario está tan tensionado, que tener un recurso más ayuda y desahoga un poco está situación”, sentencia.

Distribución en el territorio

De triunfar el pilotaje, las nuevas ambulancias de tipo C llegarán a todas las áreas de salud de la Comunidad. El número variará en función de las necesidades de éstas y la previsión es que en Burgos se incorporen siete, mientras que se prevén seis para el Área de León y otras tantas para la de Salamanca. En Zamora se marcan cuatro según figura en el borrador del plan, al igual que en Palencia; mientras que en Ávila serán tres, las mismas que en la de Soria; en el Área de Salud de El Bierzo, dos; otras dos en la de Segovia, y en Valladolid una en el Área de Valladolid Este y dos en la Oeste, una de ellas la de Villafrechós.