Las autoridades sanitarias de Castilla y León realizaron durante la semana transcurrida entre el 1 y el 7 de octubre un total de 25.530 pruebas diagnósticas de COVID-19 en la Comunidad, divididas entre las 17.330 PCR llevadas a cabo y las 8.200 pruebas de antígenos, lo que hace que, en el conjunto de Castilla y León, y desde el inicio de la crisis sanitaria, se hayan efectuado ya 3.259.046 pruebas diagnósticas para la detección de la infección.
De esta manera, la tasa de pruebas diagnósticas por cada 1.000 habitantes se sitúa en Castilla y León en 1.356,31, por encima de las 1.273,93 que se desarrollaron en el conjunto del territorio nacional, según los datos difundidos hoy por el Ministerio de Sanidad del Gobierno de España y recogidos por la agencia Ical.
Asimismo, el último informe de pruebas diagnósticas indica que, en la última semana, en Castilla y León se realizaron tres test rápidos, hasta un total, desde que se inició la pandemia del coronavirus, de 464.330, con una tasa de 193,24 por cada 1.000 habitantes, también superior a la media nacional, que en relación a este parámetro se sitúa en 77,94.
Por último, el documento también indica que, en la semana de estudio se acometieron 267 de otras pruebas de detección de anticuerpos, hasta un global de 93.050. La tasa para este tipo de pruebas ascendió a 38,72 por cada 1.000 habitantes, justo la mitad que las 66,77 de la media nacional.