El anisakis es un gusano transparente de unos 2 o 3 centímetros de largo. Se trata de un parásito que puede encontrarse en estómago de pescado y cefalópodos y que puede provocar alteraciones digestivas y reacciones alérgicas.
Para eliminar el anisakis el pescado debe ser sometido a congelación de al menos -20º C durante más de 48 horas. En algunos restaurantes de cocina japonesa y en casos como el del salmón y el atún, se someten a congelaciones de -60º.
Para evitar el anisakis en casa podemos limpiar el pescado a conciencia separando sus vísceras cuanto antes y congelándolo durante una semana. Además, es aconsejable cocinarlo bien a más de 60 grados y durante al mínimo 10 minutos.
De lo contrario, una infección por anisakis puede causar naúseas, vómitos, diarrea y dolor abdominal así como alguna que otra reacción alérgica que pueden tardar en aparecer incluso dos semanas después de haberlo consumido.
Con precaución pero que no cunda el pánico: no todos los pescados tienen anisakis. Solo se dan en productos del mar o criados en él, pero están exentos los pescados de río y criados en piscifactorías de agua dulce.
Recuerda respetar siempre los los tiempos de congelación y cocción para evitar sustos y en caso de sufrir alguno de los síntomas, acude a tu médico.