La Junta de Seguridad Ciudadana se ha reunido con los operativos policiales de la provincia para ultimar el dispositivo de atención y cuidados para las fiestas de Navidad.
La subdelegada del Gobierno, Marian Rueda, ha presidido la reunión, en la que se ha analizado el operativo para estas fechas festivas, en el que cooperarán la Policía Nacional y la Local en la ciudad de Segovia, y la Guardia Civil y las policías locales en los municipios que cuenten con este cuerpo de seguridad (Cuéllar y El Espinar).
En la Junta de Seguridad, que se ha celebrado en la Sala de Juntas de la Subdelegación del Gobierno, han participado la concejala de Seguridad del Ayuntamiento de Segovia, Raquel Alonso; el teniente coronel de la Guardia Civil, Benito Donate; el comisario de la Policía Nacional, Miguel Ángel Martínez; el inspector jefe de Seguridad Ciudadana, Luis Villegas; el mayor jefe de la Policía Local de Segovia, Vicente Sanz; el jefe de la Policía Local de El Espinar, David Gutiérrez; el jefe de la Policía Local de Cuéllar, José María Pascual; el secretario general de la Subdelegación, Francisco Javier de Santos; y un representante de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León.
El dispositivo se intensificará principalmente en los actos y lugares que mayor afluencia de personas congreguen, como la Tarde Buena, las carreras de fin de año y las cabalgatas de Reyes y la tradicional carrera del Pavo. También se prestará especial atención, tanto en Segovia como en la provincia, a las zonas y calles comerciales, mercados, actos religiosos, centros de ocio, medios de transporte (estaciones de tren y de autobuses)…, que más visiten los ciudadanos.
Marian Rueda pide a los ciudadanos que “extremen la precaución y cuiden de sus objetos personales para evitar hurtos y robos, así como con las estafas (como la ‘estampita’, el ‘tocomocho’, el ‘abrazo cariñoso’…); y el máximo cuidado en las compras por internet para evitar fraudes y ciberdelitos”.
Además, durante las fechas navideñas se intensificarán los controles de tráfico de control de alcoholemia y drogas, para evitar que las personas que hayan consumido estas sustancias se pongan al frente de un volante y puedan ocasionar accidentes, muertes o desgracias personales y familiares.